A dos días del primer paro general al Gobierno de Javier Milei, en el que la oposición marchará en contra del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) de desregulación de la economía y del proyecto de “Ley Ómnibus”, el cotitular de la CGT, Pablo Moyano, afirmó que será “incontrolable la cantidad” de manifestantes que se concentrarán frente al Congreso. 

Además aseguró que a los trabajadores nadie los "corre con multas ni con la cantidad de milicos que van a poner en la calle" y desafió a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y su protocolo antipiquetes al cuestionar con ironía: "¿Llevo a upa a los 40.000 camioneros o en fila india?". 

Al respecto, Moyano sostuvo que la funcionaria "quiere demostrar autoridad" con el protocolo de orden público frente a "sus mandantes, que son las corporaciones que hoy gobiernan el país".

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“Bullrich va a montar un show que nos tiene acostumbrados. Va a querer bajar gente de los puentes, de las autopistas”, apuntó. “¿Cómo vamos a respetar el protocolo? ¿Me llevo a upa a los 40.000 camioneros que voy a movilizar o en fila india? Es imposible”, resaltó el sindicalista en diálogo con radio El Destape. 

En otro tramo de la entrevista, el gremialista mencionó que uno de los objetivos que tendrá la movilización es decirle a los diputados peronistas que “están dialogando y que están dudando, que le digan al pueblo que están negociando”.

"Hay diputados que hacen campaña con la 'Marcha Peronista', pero después cuando hay una ley que va contra los laburantes, hay que ir a buscarlos para que no voten", enfatizó.

Siguiendo la misma línea, reiteró que la CGT reclamará el rechazo al proyecto de ley “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” y el mega DNU 70/2023, que incluye 366 artículos y cuyo capítulo laboral se encuentra en suspenso por un amparo presentado en la Justicia, que debe definir al respecto. 

“Ningún gremio está en posición de ceder ni un centímetro de lo logrado”, concluyó Moyano sobre la posición pro-derechos y contraria al ideal del gobierno libertario, que busca desregular la economía y derogar decenas de leyes para cambiar así una estructura estatal, que considera deficitaria y una barrera para el libre mercado al que apunta.