Wanda Nara confirmó este sábado que tiene leucemia y contó cómo transitó el camino junto a su familia hasta aceptar que sufría esta enfermedad: “Al principio le decía esa cosa que tengo yo”.

“Después pude decirle esa enfermedad y ahora la llamo por su nombre. Perdón a quien anticipó que debía anticipar mis propios tiempos”, escribió la modelo en una historia que publicó en su cuenta de Instagram.

Antes de que la mediática confirmara su diagnóstico, los medios ya habían dado por hecho que la conductora padecía esa enfermedad. Frente a esta situación, Wanda brindó una entrevista desde Turquía, donde vive junto a su marido, el futbolista Mauro Icardi, y sus hijos, para contar cómo se sentía y cómo buscó apoyarse en su familia para salir adelante. 

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En aquella ocasión había elegido la cautela sobre los rótulos de su condición y elogió a sus hijos por el apoyo y sostén: “Fue hablarlo, me acompañaron y yo los acompañé a ellos".

“La verdad que fue todo muy rápido. Me hice unos análisis de rutina que me hago siempre antes de viajar y que no dieron como esperábamos”, confesó en la entrevista, a principios de agosto.

La filtración del diagnóstico

La empresaria aludió a la actitud del periodista Jorge Lanata, quien dio a conocer el diagnóstico de los médicos a las pocas horas de difundirse la noticia sobre la realización de estudios. “Me hubiera gustado que se diera de otra manera. Son las reglas del juego y las acepto”, dijo antes de aclarar que no iniciaría acciones legales por la filtración de la información: “No le voy a hacer juicio a nadie”.

“Estoy en este ambiente desde muy chiquita y a veces puede pasar que hayan cosas que uno no quiere que salgan”, explicó Wanda y siguió: “No tengo nada para decirle a quien filtró la información. Me sacudió porque en un momento en el que no sabia qué era lo que tenía, tuve que dar explicaciones”.

La mamá de Valentino, Constantino, Benedicto, Francesca e Isabella explicó cómo fue el momento para dirigirse a su familia: “Me tuve que sentar a hablar con ellos (sus hijos), cuando quizás hubiera esperado un poco más”, aseguró Wanda.

“Fue hablarlo, me acompañaron y yo los acompañé a ellos. Cuando me dicen lo que tengo, automáticamente me metí en la cama. Después dije ‘no, estuve tanto tiempo trabajando, tengo que salir igual, maquillarme, vestirme, estar con los chicos y que vean que mamá está haciendo todo para estar bien’”, agregó.

Y se sinceró: “Me pasa que siento que soy la fuerte de la familia, la que contiene. Yo sentía que si me caía se caían todos conmigo porque estaban muy shockeados”.

Wanda confesó cuán importante fue hablarles con la verdad y precisó que siguió los consejos de los médicos para explicarles sobre su salud. “Les mostré fotos porque los médicos me dijeron que les podía mostrar cosas para que ellos entiendan”, detalló. 

A la hora de hablar sobre el tratamiento que afrontará, confirmó que eligió Argentina para recuperarse y que se tratará en Fundaleu. "Es el mismo tratamiento para todos. A veces dicen ‘no, bueno, ella tiene posición’. Yo elegí mi país. Consulté en Milán, en París, y en cualquier lugar es el mismo tratamiento. Uno tiene que elegir donde se siente mejor, más cómodo y más contenido”, expresó.

Aseguró, además, que está muy contenida por su familia y que descubrió que tiene amigos reales en el medio: “En los Martín Fierro dije que en cada mesa tenía un amigo y me lo demostraron. Me di cuenta que tengo muchos amigos en el ambiente que están en las buenas, pero en las malas también están”.

Finalmente, Wanda contó que así como siempre ayudó en distintas causas, espera recuperarse para poder colaborar desde su lugar. “Es increíble cómo la vida te marca situaciones. Yo ayudé y nunca te imaginás que te puede tocar a vos y me pasó”, reflexionó y añadió: “Me gustaría encontrar las palabras justas para decir y poder ayudar a alguien que necesite una palabra, y hoy no sé si soy la indicada, pero estoy trabajando en eso”.