En el marco del brote de dengue más importante en la historia de Argentina y el consecuente incremento en la demanda de repelentes, el Gobierno decidió suspender la intervención de la ANMAT para los importadores de aerosol, crema, spray y gel antimosquitos durante 30 días.

"Dicha excepción regirá tanto para el régimen general - importadores con despachos a plaza - como para el régimen particular de manera que las personas que quieran comprar dichos productos en el exterior podrán hacerlo a través del servicio courier (puerta a puerta) sin necesidad de efectuar trámites adicionales ante el ANMAT", precisó un texto difundido por el vocero presidencial, Manuel Adorni.

Durante la temporada 2023/2024, esta enfermedad ya cuenta con más de 180.000 casos confirmados y 129 muertes en el país.

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No obstante, el comunicado señaló que "la importación de repelentes y sus insumos se simplificó desde el inicio de esta gestión con múltiples medidas". 

"Además de la eliminación de las SIRA, las Licencias No Automática y el CEF, que abarcó a todas las importaciones, se dispuso para estos productos una reducción del plazo de pago (desde el esquema de 4 cuotas a los 30, 60, 90 y 120 días) a una única cuota a los 30 días", completó.

Por su parte el ministro de Salud, Mario Russo, aseguró este martes que en "las próximas dos semanas" se va a resolver la falta de stock, en medio de un brote histórico de la enfermedad en Argentina.

"Los productores de repelentes nos han comentado que cambiaron su logística para producir, están produciendo en su máxima capacidad", afirmó Russo en declaraciones televisivas.

En esa línea, el funcionario expresó: "Desde el inicio de la gestión, el ministerio de Economía tomó medidas para facilitar la importación de este tipo de productos reduciendo impuestos".

En cuanto a la vacuna, desde Salud indicaron que no fue incluida en el calendario nacional porque "continúa siendo sometida a estudios para establecer su efectividad según el rango etario y regiones endémicas". Además, sostuvieron que la inyección "no es una herramienta que esté validada para controlar la transmisión de la enfermedad en el contexto del brote".

En este sentido, remarcaron que  todavía no cuentan con "la evidencia suficiente" para "determinar un programa de inmunización focalizada y por rango etario, que sea seguro y efectivo" y que "la eliminación del mosquito en el territorio es la primera línea de defensa".