Nuevos líderes de la política argentina: el 65% de su influencia en las redes surge de Instagram
Rodeados de seguidores frescos y proactivos, comparten la estrategia que le dio el triunfo a Javier Milei: hacen base en esa plataforma, publican contenidos personales, son directos, espontáneos y picantes.
Entienden a la perfección las reglas de las redes sociales y juegan el partido con soltura y destreza. Nacieron en este potrero, crecieron tirando caños por DM y metiendo goles en vivo. La nueva generación de políticos que impulsa su carrera desde las plataformas digitales cobra nueva relevancia ahora que la Argentina tiene en el sillón de Rivadavia al primer Presidente nativo digital.
Pero que las redes importan no es noticia. La campaña presidencial de Barack Obama en 2008 fue la verdadera novedad. Hoy, 15 años más tarde, el éxito no depende de usarlas o no (eso ya no se discute), sino de cómo leer los consumos de información actuales y asimilarlos de manera orgánica. De aquellas primeras campañas súpercoacheadas en Twitter y de los escándalos de Facebook aliado a Cambridge Analytica en 2016 se aprendió que, además de ser eficaces, las redes sociales deben parecerlo. “Por eso esta generación de políticos que asoma en Argentina y que se inspira en casos de éxito internacionales, como el de Alexandria Ocasio-Cortez, prioriza la frescura y la espontaneidad como estrategias de construcción en el tiempo”, destaca Malena Miranda, directora creativa de Dinamarca PR.
Watch, el informe de redes sociales de Dinamarca PR, respalda con datos muy precisos este panorama. En su última entrega describe el desempeño digital de un seleccionado de nuevos líderes de la política local del que aparece una clara tendencia: Instagram es la nueva red social de la política.
El 65,20% de la influencia de los jóvenes políticos surge de ahí. Al tanto de su efectividad, concentran en esta plataforma el mayor volumen de posteos.
A diferencia de los políticos que, con amplia trayectoria en la escena pública, arrastran seguidores “envejecidos”, menos activos en redes y atomizados en Facebook o incluso en X, éstos disputan el campeonato en Instagram y la copa en TikTok. No desprecian el resto de las plataformas, pero saben que los puntos se juegan donde las jóvenes (como ellos) pasan largas horas al día, interactúan y esperan de ellos su mejor versión.
Entre los talentos locales, Juan Grabois, Ofelia Fernández y Rodrigo de Loredo concentran el 86% de la influencia en redes. “Lo de Fernández es doblemente meritorio porque no muestra signos de hiperactividad: selecciona muy estratégicamente sus publicaciones, elige mensajes contundentes y piezas audiovisuales que siempre rinden y despiertan interés”, explica Miranda.
Juan Grabois (55,92% de influencia en redes sociales) es contundente en sus intervenciones, con interpelaciones directas a cámara, declaraciones explosivas y mensajes que convocan a la interacción. Su recorrido previo (es el único de la nueva generación que ya fue precandidato presidencial) le asegura una relevante comunidad de seguidores y un gran alcance que se potencia con las repercusiones en medios tradicionales.
El círculo virtuoso que comienza con la publicación preferente en Instagram y evoluciona en óptimos rendimientos en influencia se recompensa con un volumen de seguidores fieles y agradecidos que representan el 42,31% de la comunidad total. Sin dudas, las jóvenes figuras de la política argentina entendieron dónde se juegan los puntos y salieron a ganar.