La fiscal de La Plata Betina Lacki reabrió la investigación sobre Julio “Chocolate” Rigau, el puntero del Partido Justicialista (PJ) detenido a comienzos de septiembre en un cajero automático del Banco Provincia ubicado en la capital bonaerense, del que habría retirado poco más de $1.000.000 de las tarjetas de débito de 48 empleados de la Legislatura provincial

Además, Lacki dispuso 20 medidas de prueba, entre las que se encuentra el peritaje del teléfono celular de Rigau, previsto para el 15 de octubre, y la citación para que declaren los dueños de las tarjetas incautadas que aún no pasaron por la Fiscalía.

La investigación fue retomada luego de que el fiscal general de La Plata, Héctor Vogliolo, objetara el pasado viernes el fallo de la Cámara de Apelaciones que había anulado la causa. Los jueces Juan Benavides y Alejandro Villordo habían argumentado que la Policía detuvo a Rigau sin previa autorización judicial. Sin embargo, aunque aún falta el dictamen de Casación, el caso se reabrió el último miércoles, tras haber estado dos semanas en pausa.

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Del móvil marca Samsung, modelo SM-G532M y de color gris que le secuestraron a Rigau el día de su detención, Lacki pidió “un análisis técnico completo y detallado del contenido del aparato, informando resultado de la agenda, videos, imágenes y comunicaciones entrantes y salientes, así como cualquier otro dato de interés”.

A su vez, solicitó al Banco Provincia las filmaciones de las cámaras de seguridad del sector de cajeros automáticos de la sucursal de Plaza San Martín correspondientes a los días y horarios en los que se cree que Rigau realizó las extracciones de dinero con las diferentes tarjetas. Se trata del martes 5 de septiembre entre las 5 y las 7:30; el miércoles 6 entre las 20 y las 22; el jueves 7 entre las 19 y las 21 y el viernes 8 entre las 18 y las 22.

En cuanto a la Cámara de Diputados bonaerense, la fiscal pidió explicaciones sobre qué significa que un empleado trabaje en el “bloque político”, como figuraba en los legajos de los legisladores. “En la mayoría de los casos, se trató de personas que entraron por el PJ, el Frente Renovador o Juntos por el Cambio y luego empezaron a revistar en el ‘bloque político’”, indicó.

El objetivo de Lacki es determinar de qué trabajan los supuestos empleados que percibían $580.000 por mes y que le daban sus respectivas tarjetas de débito a Rigau para que les cobrara el sueldo.