Tras recibir cinco disparos a quemarropa en un intento de magnicidio, el primer ministro eslovaco, Robert Fico, se encontraba este jueves "muy grave" pero estable, según informaron fuentes médicas.

Miriam Lapunikova, directora del hospital Universitario F.D. Roosevelt de Banska Bystrica, donde está ingresado Fico, dijo que el Primer Ministro había sido sometido a cinco horas de cirugía con dos equipos para tratar múltiples heridas de bala

"En este momento su estado está estabilizado, pero muy grave. Estará en la unidad de cuidados intensivos", dijo a la prensa.

TE PODRÍA INTERESAR: Un argentino de 20 años murió combatiendo para las Fuerzas de Defensa de Israel en Gaza

El hecho ocurrido durante la mañana del miércoles significó el primer atentado de gran envergadura contra un dirigente político europeo en más de 20 años. 

En este sentido, analistas políticos y parlamentarios lo consideran indicativo de un clima político cada vez más febril y polarizado en todo el continente, con la guerra entre Rusia y Ucrania como principal agravante.

La presidenta Zuzana Caputova pidió que se calmaran las tensiones políticas y dijo que invitaría a todos los líderes de los partidos parlamentarios a una reunión conjunta. Peter Pellegrini, aliado de Fico y presidente electo, instó a los partidos a suspender o moderar su campaña para las elecciones al Parlamento Europeo del mes que viene.

"Si hay algo que el pueblo eslovaco necesita hoy con urgencia es, al menos, un consenso básico y unidad entre los representantes políticos eslovacos", dijo Pellegrini, que ganó las elecciones de abril para el cargo.

El sitio web de noticias tvnoviny.sk informó el jueves que la Policía había acusado al sospechoso de intento de asesinato y que podría enfrentarse a penas de entre 25 años y cadena perpetua. Se trata de Juraj Cintula, un hombre de 71 años miembro de la Asociación Eslovaca de Escritores.

Por otra parte, el ministro del Interior, Matus Sutaj Estok, dijo en rueda de prensa el miércoles que el ataque estaba "políticamente motivado".

Fico ha sido una importante figura de la escena política eslovaca de los últimos 20 años, fusionando sus opiniones económicas de izquierdas con el nacionalismo y recogiendo el descontento generalizado sobre el nivel de vida. 

​​Sus llamamientos a poner fin a las sanciones a Rusia y a detener el suministro de armas a Ucrania le hicieron ganarse la simpatía de Moscú, como también generar enemigos dentro de su país y, principalmente, de la Unión Europea.