El balance de la aplicación del denominado “dólar soja” fue más que positivo. En su anuncio, un mes atrás, se proyectaba una liquidación de U$S 5.000 millones por parte del campo. Cuatro semanas más tarde, las divisas que ingresaron a las arcas del Banco Central no solo cumplieron el objetivo, sino que superaron los U$S 8.000 millones. Pero el problema de los dólares no termina. Por eso, el ministro de Economía, Sergio Massa, y su equipo analizan distintas medidas para aumentar las exportaciones de algunos sectores relegados, administrar el drenaje por importaciones y, a su vez, utilizar parte de lo recaudado para los más relegados.

Importaciones. Massa lo comentó en varias oportunidades: las cautelares que presentan algunas empresas que la justicia habilitan en términos de importaciones atentan contra el equilibrio de las reservas del Estado. En los últimos dos años hubo 10.500 fallos en ese sentido, que implicaron alrededor de U$S 1.800 millones. Actualmente, son cerca de 3.500 las que están activas. Mediante un nuevo sistema, el Palacio de Hacienda intentará simplificar las compras al exterior de insumos necesarios para la producción –con fechas concretas de acceso a las divisas– y nuevas autorizaciones. De esa forma, en Economía procuran que dichas cautelares caigan.

Dólar tecno. Algunos funcionarios lo anticiparon: Ariel Sujarchuk, secretario de Economía del Conocimiento, adelantó que habría nuevas medidas para facilitar el acceso al mercado cambiario por parte de compañías de ese sector. En el “superministerio” se analiza la idea de habilitar una cantidad de divisas sobre un porcentaje de las exportaciones incrementales –las que estén por encima de lo que registraron el año pasado–. Podría ser el 30%, aunque también consideran ampliarlo a un 50% si las firmas deciden radicar nuevas inversiones en el país.

Vulnerables. Con los datos de la indigencia publicados por el INDEC –que mostraron un 8,8% en el primer semestre de 2022–, la crítica punzante de la vicepresidenta Cristina Kirchner al nuevo ministro se hizo sentir por primera vez. En sus redes sociales, le exigió que lanzara medidas para moderar el incremento de los precios de los alimentos. En su última aparición pública, Massa anticipó que esta semana habría noticias destinadas a la “protección” de “grupos vulnerables”. Entre las opciones que se barajan, un refuerzo de alrededor de $50.000 en tres cuotas –octubre, noviembre y diciembre– para este sector de la población es una alternativa que consideran en el equipo del tigrense.

Economías regionales. Cuando se lanzó el “dólar soja”, muchos otros sectores del agro que no quedaron involucrados en la iniciativa pusieron el grito en el cielo al verse marginados. Por eso, Massa adelantó que habría una ayuda para las cadenas del tabaco, la lana, el arroz, los cítricos y el vino. Será un fondo de $32.000 millones destinado a esos segmentos. Además, habrá otro fondo de $42.000 millones para algunos pequeños productores de maíz y soja que liquidaron antes de que se lanzara la cotización especial y se perdieron del beneficio instrumentado por Economía.

Dólar turista. El balance en el sector turístico da, como de costumbre, en negativo. La sangría de dólares por los viajes y compras en el extranjero representaron en agosto alrededor de U$S 800 millones, una cifra histórica. Por eso, en el equipo de Massa piensan en distintas formas de encarecer la cotización para este tipo de consumo y, de esa manera, desincentivarlo.