El decreto 260/2020 que establece la suspensión durante 30 días de vuelos internacionales provenientes de las zonas afectadas por el coronavirus no alcanza a los buques.

Como consecuencia, las embarcaciones de todo el mundo siguen atracando en los puertos de la Argentina, incluso las que vienen de países en donde el COVID-19 escaló.

Aunque los barcos hacen largos recorridos de un continente a otro, la norma no define medidas de control para ellos. No hay referencias sobre el chequeo de las fechas de salidas de los cruceros desde sus puertos de origen. Tampoco las páginas oficiales de cada puerto indican cuándo comenzaron el viaje, sólo figura el día y hora de llegada, y de partida.

El DNU habilita al Ministerio de Salud a tomar medidas para limitar que bajen los pasajeros. "Coordinar con las distintas jurisdicciones la adopción de medidas de salud pública, para restringir el desembarco de pasajeros de naves y aeronaves o circulación de transporte colectivo de pasajeros, subterráneos o trenes, o el aislamiento de zonas o regiones, o establecer restricciones de traslados, y sus excepciones".

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También hace referencia a los barcos cuando plantea que la Subsecretaría de Puertos, Vías Navegables y Marina Mercante podrá designar corredores de seguros marítimos. En el caso de que la autoridad sanitaria determine que esa entrada a la Argentina tiene la capacidad "para responder a la emergencia sanitaria declarada internacionalmente de COVID-19".

El decreto establece que las “zonas afectadas” por la pandemia de COVID-19 son los Estados miembros de la Unión Europea, miembros del Espacio Schengen, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Estados Unidos de América, República de Corea, Estado del Japón, República Popular China y República Islámica de Irán.

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Ushuaia

Los habitantes de Ushuaia, en Tierra del Fuego, se alertaron por el desembarco del crucero Coral Princess con 4.000 extranjeros, según Infobae. En la página oficial del puerto figura que atracó a las 11.45hs. el pasado 11 de marzo y se retiró a las 20hs.

Por su parte, el Director Ejecutivo del puerto, Rubén Leguizamón, sostuvo que "nunca llegó el crucero Coral Princess". A su vez, el funcionario aclaró que "no llegaron 1.700 chinos a Ushuaia" y agregó que dar esa información implica "generar pánico en la sociedad".

Leguizamón explicó que se confundió el nombre de esta embarcación con otra que sí había llegado el mismo día.

"El puerto de Ushuaia recibe pasajeros que van desde o hacia la Antártida. Pero los barcos no salieron de Europa hace poco, comenzaron los recorridos meses atrás, al inicio de la temporada", explica el director.

Antártida.

"Los controles médicos se hacen dentro del barco y antes de llegar al puerto, el capitán debe avisar si tienen algún enfermo con coronavirus a bordo o cualquier otra enfermedad", dice.

En el caso de que exista una persona infectada, "la embarcación no ingresa al puerto y queda afuera". En ese momento, sostiene que "automáticamente las agencias de sanidad hacen el análisis virósico de la persona con caso sospechoso". Y si da positivo, el barco "queda en cuarentena".

El funcionario sostiene que en "Tierra del Fuego se conformó un Comité de Emergencia en enero". El mismo reúne a la Sanidad de Frontera, la Prefectura, Migraciones, Aduana y el Ministerio de Salud para lograr una efectivo prevención y detección del coronavirus.