El Gobierno intenta ralentizar la aceleración de la inflación. De ahí las repetidas reuniones con los representantes de todos los sectores de la producción y la comercialización de productos para avanzar en un acuerdo social que frene la escalada de precios al mínimo posible en las variables que no tengan que ver con la macro. Con ese propósito llegó Roberto Feletti a la administración nacional.

En los últimos días, el secretario de Comercio que ya lleva más de un mes en gestión mantuvo encuentros con mayoristas y minoristas en función de volver más eficaz el congelamiento. También hizo lo propio con actores del sector de la carne, que la semana pasada aumentó un 25% su valor de hacienda, algo que se espera que impacte en las góndolas y carnicerías de barrio.

La ¿metida de pata? y el cruce

En una entrevista con Página 12, Feletti deslizó la posibilidad de llevar a cabo un incremento en las retenciones a la exportación de carne, que hoy representa un 9% e implica una recaudación de alrededor de US$ 240 millones. La ocurrencia surgió a partir de la motivación de desligar los precios internos de los internacionales, para que los argentinos y argentinas paguen algo acorde a su poder adquisitivo.

La idea del funcionario apadrinado por Cristina Fernández de Kirchner generó un gran malestar en los ministros que encabezan las negociaciones en conjunto con el sector industrial y el campo. Entre ellos Martín Guzmán y Julián Domínguez, pero especialmente su jefe directo en lo formal: Matías Kulfas. “A lo mejor tuvo una actitud que no fue la más indicada, porque no es lo más apropiado esto de pensar en voz alta siendo un funcionario”, contradijo el ministro de Desarrollo Productivo, quien también aclaró que “de ninguna manera hay una decisión tomada al respecto”.

El secretario de Comercio Interior Roberto Feletti y su jefe directo, el ministro de Desarrollo Productivo Matías Kulfas.

También le valió la reprimenda pública de Domínguez: en un evento en la Bolsa de Cereales, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca evitó tocar el tema en profundidad, pero dejó en claro que, si bien mantiene una relación “excelente” con Feletti, tienen criterios diferentes para neutralizar los aumentos de la carne. “Si de mi dependiera, facilitaría todos los instrumentos para poder exportar”, sostuvo.

En la mesa integrada por Kulfas, Guzmán y Domínguez consideran que el secretario fue poco prudente al proponer una medida que tensionará y embarrará más la negociación con el campo. En esa mesa también hay una silla para Feletti, el único de los cuatro que no es ministro, y al mismo tiempo, el único que representa al ala más dura del Gobierno en esas negociaciones.