Mauricio Macri volverá a la presidencia del partido que gestó hace más de 20 años y dejó de liderar en los papeles hace 12, en el marco de unas elecciones internas nacionales en las que no tendría competencia y cuyo cierre de listas es este martes 19 de marzo. En tanto, el fundador del PRO continúa las negociaciones con otros sectores amarillos que reclaman tener un lugar en la dirección: se disputan las dos vicepresidencias, la secretaría general, 25 consejeros y vocales.

De esta forma, en sintonía con su regreso al centro de la escena política al brindar al Gobierno de Javier Milei gran parte de su estructura, el exjefe de Estado conducirá nuevamente el espacio que hasta hoy está en manos de la excandidata presidencial y actual ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

Macri no sólo buscará reunificar el partido luego de que sus últimos dos aspirantes a la Casa Rosada, Horacio Rodríguez Larreta y la propia Bullrich activaran una fuerte división al interior de las filas del PRO tras la derrota electoral de 2023, sino también intervenir aún más en la gestión de La Libertad Avanza, a la que apoyó abiertamente y alentó una alianza para vencer al kirchnerismo en el balotaje presidencial de noviembre .

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Si bien la intención del exmandatario con el actual Gobierno era negociar en conjunto, la ministra y líder del PRO lo hizo aparentemente en solitario, y sólo obtuvo un cargo para ella y otro para Luis Petri en la cartera de Defensa. En tanto, de cara a las elecciones legislativas de 2025, el expresidente busca posicionarse como principal interlocutor del jefe de Estado y de allí su regreso al centro de la escena partidaria.

Además de las disputas por las elecciones internas del bloque, sus integrantes discuten sobre el papel del espacio en la escena política. Mientras para Bullrich, ya dentro del gabinete y con relativa centralidad, el espacio amarillo debe subordinarse a la gestión nacional, Rodríguez Larreta rechaza una coalición y considera que lo mejor es distanciarse.

"Yo no estoy de acuerdo en entregarle el PRO a Milei, sea quien sea el que conduce el partido. Creo y defiendo a fondo los valores constitutivos del PRO", señaló días atrás el exjefe de Gobierno porteño, en declaraciones a Clarín. Al respecto, destacó: "Teníamos una visión de sumar, de respetar al que piensa diferente, de no entrar en la confrontación ni en las agresiones".

Por su parte, Macri apoya al Presidente públicamente pero, a la vez, sostiene que el espacio que fundó hace dos décadas debe acompañar al Gobierno sin perder su identidad. En este contexto, se espera que el martes se oficialice como candidato único a la jefatura nacional del PRO y emprenda la marcha de una nueva etapa para la derecha argentina.