La Justicia decidió liberar a Alberto Soria, quien era el único detenido por el atentado que tuvo como objetivo al presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino. La determinación se fundamentó básicamente en la llamada "falta de mérito".

El incidente ocurrió el jueves pasado, cuando un paquete explosivo se detonó en las oficinas de la entidad ubicadas en Palermo, lo que derivó en el traslado de siete personas al hospital debido a las lesiones sufridas durante el sorpresivo ataque. 

Tras una serie de averiguaciones, el juez Daniel Rafecas constató que en el momento en que se entregó el artefacto el hombre se encontraba tomando un curso en otro lugar de la Ciudad.

"Según con los resultados de las más recientes medidas de prueba dispuestas durante el fin de semana, se pudo corroborar que Soria, de 40 años, tal como expuso ante el Juez durante su indagatoria, entre las 10 y las 13 horas del día jueves, participó de una capacitación en un salón en Barrio Norte", detalló el escrito judicial.

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"La detención provisoria del sospechoso se había basado en los movimientos de su tarjeta SUBE; en un análisis antropomórfico elaborado por especialistas del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires; y en un hallazgo en su domicilio de una Guía T en donde el hombre había inscripto a mano ‘La Rural' y su ubicación", señaló el magistrado. 

El sospechoso, ahora excarcelado, es un agente inmobiliario que había sido aprehendido el sábado por la madrugada tras un allanamiento en su domicilio, situado en la intersección de Juan B. Justo y Chivilcoy, en el barrio porteño de Floresta.

La investigación, llevada a cabo por la División Investigaciones Especiales de la Policía de la Ciudad, en coordinación con el Juzgado Federal N° 7, había permitido su identificación como el presunto autor del atentado.

Se llevó a cabo un análisis de su perfil virtual para constatar una de las primeras hipótesis, que estuvo ligada a un supuesto interés por el extremismo vegano o el ambientalismo. Finalmente, los investigadores descartaron esta alternativa, aunque había trascendido que Soria tenía antecedentes por amenazas antisemitas anónimas.

Este domingo había trascendido de fuentes ligadas a la causa que había dudas sobre su vinculación con el violento episodio, ya que, en principio, "la identidad del sospechoso no encajaría con el perfil".

El atentado ocurrió durante la mañana del jueves, cuando la secretaria de Pino abrió una encomienda que iba dirigida a su jefe. En ese preciso momento, se activó un mecanismo explosivo que lanzó una llamarada. De forma preventiva, el jefe de la entidad agropecuaria, su asistente y otras dos personas que se encontraban en el lugar fueron trasladadas al hospital Fernández, aunque solo la primera mujer sufrió escoriaciones muy leves.