Una vez más las redes sociales mostraron su costado más peligroso este fin de semana, cuando un niño de 11 años falleció en Mendoza aparentemente mientras intentaba llevar a cabo un desafío viral de TikTok. Producto de las lesiones que le ocasionó el supuesto reto virtual debió ser internado en el Hospital Humberto Notti por una asfixia prolongada autoinducida.

El denominando "blackout challenge" o desafío "del apagón" implica una serie de maniobras que conllevan un riesgo de muerte concreto. Con total imprudencia, se incita en el entorno digital a que los usuarios se filmen mientras interrumpen su respiración por un periodo indeterminado para luego compartir el video.

Desde la gigante china retiraron todo contenido ligado al tema y -al hacer búsquedas al respecto- ahora agregaron la leyenda "Tu seguridad importa. Algunos retos en línea pueden ser peligrosos, lesivos o incluso falsos".

"Aprende a reconocer los retos que pueden causar daños para proteger tu salud y bienestar", agrega la advertencia que aparece en la plataforma más usada por el público digital joven.

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De todas formas, en el nuevo caso local las autoridades no se cerraron a que esta hipótesis sea el motivo del deceso y trascendió que indagarán en todas las posibles causas detrás del suceso que provocó el deceso del pequeño mendocino, que tuvo lugar el pasado viernes y está a cargo de la fiscal Andrea Lazo.

"La comunidad educativa del colegio Santo Tomás de Aquino y los Frailes Domínicos se unen en profundo pesar por el fallecimiento del alumno de sexto grado de nuestra institución. Elevamos nuestras oraciones con fe, pidiendo a Dios que reciba su alma en su infinita misericordia y que brinde consuelo y fortaleza a su familia", escribieron desde el colegio al que asistía el menor, a través de la cuenta oficial de Instagram. Además, suspendieron las clases en la institución el pasado lunes en señal de luto.

En un episodio con características similares por su relación con las redes sociales a edades tempranas y porque también tuvo lugar en Mendoza, tres adolescentes fueron acusados de haber abusado sexualmente de un compañero dentro del aula en una escuela, en plena clase de inglés.

Los agresores justificaron el accionar al destacar que se trató de un "juego" que habían sacado también de la aplicación TikTok.

Desde la Dirección General de Escuelas (DGE) resolvieron reubicar a los tres chicos indicados como los agresores, además de consignar la necesidad de asistencia psicológica para la víctima.