A 15 días del femicidio de Catalina Gutiérrez en Córdoba, el principal sospechoso del crimen, su amigo Néstor Soto, confesó haber sido el autor del asesinato, según contó este viernes el abogado Gastón Schönfeld, defensor del imputado.

Soto admitió la autoría del hecho durante una audiencia con el fiscal José Mana en los tribunales cordobeses. "Dijo que fue él", reveló el letrado en declaraciones radiales.

Según trascendió en medios locales, Soto estuvo 28 minutos con Mana y se negó a responder preguntas. "Fue breve la manifestación que hizo", agregó el abogado, luego de que el joven de 21 años saliera esposado para ser trasladado al penal de Bouwer, donde permanece desde hace casi dos semanas.

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En este marco, el joven fue imputado de "homicidio doblemente calificado por alevosía y mediando violencia de género, en concurso ideal", luego de que en un primer momento se había caratulado la causa como "homicidio simple". El cargo, a los pocos días, se elevó.

Soto, oriundo de Bariloche, y Gutiérrez eran compañeros en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), en donde las amigas de Catalina realizaron un emotivo posteo en el comienzo de clases después del receso invernal y colocaron un cartel sobre el banco en el que la joven se sentaba: "Acá debería estar Cata".

El crimen ocurrió en la madrugada del jueves 18 de julio. Una de las hipótesis planteó que Soto habría estrangulado a Catalina en su domicilio y luego cargó su cuerpo en un Renault Clio para desecharlo en un descampado, situado a un par de cuadras. 

La otra teoría que manejan los investigadores es que la influencer y su amigo no estuvieron en la casa de la joven y se mantuvieron todo el tiempo en el auto.

Al día siguiente, la autopsia determinó que la joven de 21 años murió asfixiada por estrangulamiento. Los especialistas también reportaron que el cuerpo de la víctima presentó golpes y quemaduras, aunque no determinaron si el crimen se perpetró con las manos o con algún elemento. Además, constataron que no hubo signos de un presunto abuso sexual.