A días de terminar su mandato como presidente de Estados Unidos, Joe Biden removió a Cuba de una lista de Estados considerados patrocinadores del terrorismo. Como respuesta a su decisión, desde el país caribeño anunciaron que 533 presos políticos van a ser puestos en libertad.

Para aplicar esta medida, Biden deberá rescindir un memorando que fue promulgado en enero de 2021, justamente por quien ahora será su sucesor, Donald Trump. La decisión fue anunciada este martes, seis días antes de que el republicano haga su regreso a la Casa Blanca.

De acuerdo a lo que informaron altos cargos de la Administración estadounidense, la decisión de sacar a Cuba de la lista de países que promueven el terrorismo fue tomada para acelerar la liberación de presos cubanos, como parte de un proceso en el que hace de mediador el Vaticano. Así fue como, minutos después del anuncio de Washington, La Habana anunció la liberación de los presos.

Además, el Presidente suspendió el derecho que tenían los ciudadanos estadounidenses de demandar en tribunales de su país la expropiación de propiedades que tenían en Cuba. También levantó las sanciones financieras que se le habían aplicado a la isla en 2017 a través de un memorando.

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Según informaron desde Washington, varios países habían solicitado que Estados Unidos tomara la determinación de sacar Cuba de la lista de países que promueven el terrorismo, entre ellos España, Brasil, Colombia, Chile y Canadá. Gracias a esta decisión, serán liberadas personas que participaron en las protestas del 11 de julio de 2021.

Por su parte, desde La Habana respondieron que el presidente Miguel Díaz-Canel "dirigió una carta al Papa Francisco en la que, en el espíritu del Jubileo Ordinario de 2025 declarado por Su Santidad y que recién comienza, comunicó la decisión de beneficiar con el otorgamiento de libertad a 553 personas sancionadas en debido proceso por delitos diversos contemplados en la ley".

En 2021, el entonces presidente Trump había incluido a Cuba en la lista debido a que "varios fugitivos estadounidenses buscados por la Justicia o condenados por cargos de violencia política" se escondían en la isla. También se condenó la presencia de la guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que había viajado a La Habana para iniciar negociaciones de paz con el Gobierno de Colombia.