Luego de los incidentes ocurridos en las inmediaciones del Monumental en la previa del empate entre River y Argentinos Juniors el pasado domingo, el ministro de Seguridad de la Ciudad, Waldo Wolff, decidió este martes que los 30 barras involucrados sean castigados con la imposibilidad de acceder a cualquier estadio durante cuatro años.

Los implicados en los disturbios, originados por una pelea entre dos facciones de la barra brava de River, fueron liberados este martes por orden de la Fiscalía 35 de la Ciudad, tras finalizar el proceso de declaraciones, que duró varias horas.

Bajo el fundamento de preservar la integridad física y patrimonial de las personas en eventos futbolísticos, el ministro de Seguridad decidió imponer la prohibición más alta que establece la ley.

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A Wolff lo respalda la Ley 5.847, que establece en varios de sus artículos e incisos las bases jurídicas e institucionales del "Régimen Integral para Eventos Futbolísticos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires".

Los incidentes en cuestión fueron protagonizados por  un grupo de la facción disidente de Ingeniero Budge, que se bajó del micro en el que estaba llegando a la cancha y emboscó a otros barras que iban caminando por la Avenida Cantilo, a la altura del Puente Labruna. Tres de los barrabravas fueron atendidos en el hospital por heridas.

La mayoría de los detenidos integra el grupo de hinchas que horas antes habían realizado un banderazo exigiendo que se les quitara el derecho de admisión.

El operativo de seguridad estuvo a cargo de la Policía de la Ciudad, cuyos efectivos detectaron la situación, se hicieron presentes en el lugar y detuvieron a los agresores, además de decomisar palos, piedras, cuchillos y armas blancas.