En una nueva ronda del diálogo iniciado por el Gobierno con los diferentes sectores de la sociedad, el secretario de Trabajo, Julio Cordero, recibió este miércoles a los máximos referentes del llamado "Grupo de los 6", conformado por representantes de las cámaras empresariales más importantes del país, y anunció que habrá un encuentro tripartito con la Confederación General del Trabajo (CGT) la semana próxima.

Después de mantener el pasado 16 de julio un mano a mano con los líderes de la central obrera, esta vez la cita con los ejecutivos giró en torno a acelerar la reforma laboral impulsada por el presidente Javier Milei. El titular de la cartera destacó que fue una reunión "a agenda abierta con un fuerte eje en la creación de empleo en todo el país".

Asimismo, adelantó: "Desde el ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Petovello convocaremos para la semana próxima a empleadores y trabajadores para que se reúnan en una mesa tripartita donde se puedan discutir todos los temas sectoriales en el marco del diálogo social".

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"Hemos recibido del empresariado una señal positiva de compromiso con el diálogo, el consenso, con el país, y con la generación de empleo en el marco de las políticas que lleva adelante el gobierno nacional", aseguró Cordero. 

Respecto del encuentro con ejecutivos y sindicalistas, el señaló que informarán la fecha "en los próximos días" y puntualizó: "Queremos darle una fuerte impronta federal a través del Consejo Federal del Trabajo".

A su vez, los representantes del sector privado habrían acercado algunos otros temas que les preocupan además del laboral, como el atraso cambiario; la caída en la demanda interna y la retracción en la actividad industrial; así como demandas en relación con la que consideran una elevada carga impositiva en relación con su desarrollo.

La reunión comenzó a las 12:30 en la sede de la Secretaría, y participaron Daniel Funes de Rioja de la Unión Industrial Argentina (UIA); Marco Pereda, vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA); Natalio Mario Grinman de la Cámara Argentina de Comercio (CAC); Gustavo Weiss de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco);  Adelmo Gabbi de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA) y Andrés Walls de la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba).

Este conjunto de líderes empresarios adhirió recientemente a los 10 puntos que Milei incluyó en el acta que firmó con 19 gobernadores previamente este mes. Además, las cámaras aceptaron formar parte del Consejo de Mayo, que surgió como forma de materializar estos acuerdos y debe quedar conformado en 30 días desde que se rubricó el pacto.

Junto a Cordero, por el Ejecutivo participaron el subsecretario de Trabajo, Martin Huidobro; su par de Empleo, María Eugenia Cortona; de Seguridad Social, Alexandra Biasutti; el director nacional de Asuntos Sindicales, Claudio Aquino y los asesores Miguel Punte, Guillermo Limonti, Guillermo Comadira y Esteban Juanche.

El encuentro se produjo una semana después del que Cordero mantuvo con los dirigentes de la CGT, quienes también pusieron sobre la mesa de debate la reforma laboral, pero con preocupación y en dirección contraria a la que lo hicieron los empresarios. Es que si bien parte de la central obrera acepta la necesidad de discutir el estado de las relaciones de trabajo, no quiere ceder los derechos conquistados hasta acá.

En lo que respecta al sector empresarial, los ejes a los que apuntaron son: la actualización de los créditos laborales, ya que el artículo quedó fuera de la redacción final de la Ley Bases y los empresarios consideran que es uno de los más importantes; la reglamentación del fondo de cese laboral; algunas cuestiones administrativas de la normativa ligadas a los recibos de suelo y entrega de certificados; temas vinculados al régimen legal de teletrabajo y los bloqueos sindicales como causal de despido, entre otros.

De parte de Cordero, el objetivo se enfoca en poner la oreja a las demandas y dejar sobre la mesa la intención del Ejecutivo de alentar la generación de empleo privado y las alternativas que existen al respecto. A su vez, esta última cita fue la antesala de lo que el Gobierno prevé como una mesa de diálogo tripartito, que se pondría oficialmente en marcha en un par de semanas en el marco del Consejo de Mayo.