Según su perfil de Twitter, se define como bróker de bolsa, emprendedor, youtuber financiero, liberal, bostero y goleador. Ramiro Marra es todo eso y también una de las caras más visibles de La Libertad Avanza, el frente que encabeza Javier Milei y que tiene a la dolarización de la economía como una de sus propuestas más relevantes. El porqué de esa iniciativa monetaria, su trabajo en el ámbito privado y la razón por la que se metió en política, en esta charla mano a mano con El Canciller. 

“Goleador, porque soy un tipo que cuando juega al fútbol soy como Palermo, me quedo de pescador y meto todos los goles. No bajo nunca igual, siempre juego arriba. No me gusta estar bajando”, aclaró el legislador por la Ciudad de Buenos Aires, en relación al aspecto futbolístico. Pero empecemos por el principio.

¿Qué es ser liberal?

Ser liberal es reconocerse como vinimos al mundo, como seres libres. Mirarse al espejo y decir “esto soy yo". Conocerse. Tiene que ver mucho con la esencia del humano.

¿La libertad llega hasta algún lado o es un viva la pepa?

Hasta donde toca la libertad del otro. ¿Te acordás del juego que decía que "el aire es libre'"? Bueno, el tema es hasta dónde, porque hay un momento en el colegio que lo querías cagar a trompadas. Ese juego representa mucho, está hablando de la libertad y el límite de la libertad. Si yo te hago ahora lo del aire es libre, aunque vos estés entendiendo que te estoy haciendo un ejemplo y un chiste, te molesta. Decís “che pará, hay algo que es lo mío”. Es innato del ser humano.

¿En la política cómo lo visualizas?

Te voy a decir cuál es el claro ejemplo: la propiedad privada. El cuerpo es la mayor propiedad privada que tiene uno. Este es mi cuerpo, no es el tuyo. Si yo tengo un dolor lo sufro yo, no lo sufrís vos. En la política, es defender un concepto. Hay un concepto que compite con otro concepto, que es el concepto del socialismo. 

¿De qué manera compite?

Porque son intereses encontrados de gente que no quiere reconocerse como tal. Quiere vivir en un mundo ideal, como si no fuésemos seres humanos. Como si no tuviésemos un cuerpo. El ejemplo del cuerpo es porque es una realidad lo que vivimos, es la mayor propiedad privada. 

Del otro lado hay quién dice: “Tenés que dar parte de lo tuyo para el otro”. Pará, si yo quiero, no por obligación. Yo tengo la libertad de decir eso. Yo tengo la libertad de invitar a comer a un amigo, la libertad de hacer un gesto de caridad. Que puede estar bien o puede estar mal, de acuerdo a la percepción de cada uno. Es lo que corresponde. Hay gente que le gusta hacer caridad y contarlo, otra gente que hace caridad de forma silenciosa. 

¿Qué es ser un bróker financiero?

Me gusta que me estaba poniendo intelectual y me llevaste al lado más especulativo que tengo. Un lado especulativo que no creo que sea negativo, sino natural del ser humano. Los seres humanos especulamos con qué es lo mejor para nosotros en el futuro.

En mi caso, mi especulación fue en base a un emprendimiento familiar en el cuál entendimos que las finanzas son un pilar fundamental para la economía y para el desarrollo de cada individuo. 

Yo soy bróker, pero tenemos diferentes empresas que están relacionadas con el mundo financiero, principalmente enfocadas en esto que hablo, el individuo. Estamos enfocados en todo lo que tiene que ver con que la gente pueda invertir su dinero como individuo. Tenemos una plataforma de inversiones muy completa, para que sea todo muy fácil, para que todos tengan acceso al mercado de capitales. 

Lo que el bróker hace es juntar al que tiene una necesidad de dinero con el que tiene un sobrante. El sobrante podés ser vos, que tenés ahorros. El que tiene demanda de dinero puede ser una empresa que quiere financiamiento para desarrollar un negocio. 

¿Cómo se beneficia la persona que tiene los ahorros?

A través de una rentabilidad. Vos le prestas plata a otro que tiene una idea o tiene un negocio que necesita crecer, te asocias y a partir de ahí se da el crecimiento.

¿Cuánto hace que sos bróker financiero?

23 años. 

¿Del uno al diez cómo te va?

Diez en términos personales, en términos de lo que siento. Uno en términos del país en el que lamentablemente estamos. Si yo tuviera este negocio en otro lado, mi vida sería totalmente diferente.

Si te va tan bien en términos personales, decís que tenés un diez. Estás bien con tu persona y todos los días te levantás feliz. ¿Para qué te metés en política?

Porque se meten con mi libertad. Porque ese diez también está en base al diez del otro. Ahí es cuando empiezo a sociabilizar y me agarra mi lado socialista. Si el de al lado está mal no me sirve. Yo tengo para comer, llego a fin de mes. Pero, cuando quiero irme a un viaje con amigos tengo un limitante, “no tengo plata” me dice un amigo, no quiero estar invitándolo, no está bueno eso. Quiero que venga porque él tiene la posibilidad de hacerlo, no porque yo le presto dinero. Cuando ves que hay gente pidiendo en la calle es porque no le alcanza su trabajo. Hoy tenemos trabajadores pobres en la Argentina, algo tenemos que cambiar. Además, mi diez puede ser un cien en algún momento, podemos cambiar las escalas.

¿En qué momento de tu vida decidiste meterte en política?

El mayor detonante fue una vez que me cerraron la empresa, La Cámpora cerró la empresa porque estaba subiendo mucho el dólar, vinieron y cerraron al broker. Me dio mucha bronca, dije que me iba a vengar, pero de la buena manera. Hay dos venganzas: la del hijo de puta y la dulce. Es partiéndote la pierna en un partido de fútbol o metiendo diez goles, decidí meter muchos goles. Soy goleador

¿Por qué en el país de la pesca es tan caro el pescado?

Yo creo que es todo culpa de los que están en el medio. El pescado vale lo mismo, el problema son los que están en el medio. Las cosas valen lo mismo en todos lados, no tiene sentido que valgan otro precio. El problema es que tenés un Estado ineficiente que está todo el tiempo metiéndose en el medio de los negocios y hace que todo sea mucho más caro. Impuestos, emisión monetaria, eso de lo que los liberales estamos quejándonos todo el tiempo, de lo mal que se administra el Estado. Se ve reflejado en cualquier precio de cualquier producto. 

¿Estabas sentado cuando el dólar llegó a 500?

Estuve acá, tres horas haciendo un vivo, siguiendo minuto a minuto. 60 mil personas lo vieron. El minuto a minuto de cómo cambiaba el dólar blue. Una jornada muy interesante, por las intervenciones, por los movimientos, seguir lo que decían los medios de comunicación, me divirtió mucho. Lo iba a hacer devuelta hoy, pero como estuvo más tranquilo era aburrido. Si vuelve a moverse fuerte el dólar voy a prender la cámara y voy a hacer un streaming. 

¿Dónde va a terminar esto Ramiro?

En el cementerio, todos terminamos en el cementerio. 

¿La economía también?

La economía no. La economía es parte de esto lamentablemente, de la Argentina, los idas y vueltas. Necesitamos que, en algún momento, los idas y vueltas tengan una tendencia positiva como es en el mundo y no una tendencia negativa como es en Argentina. Entender que la economía tiene estos movimientos, que duelen, que tenemos que salir de esta costumbre de aceptarlo y tratar de ir a un país mucho más normal.

¿Cómo toma la persona que el dólar llegue a 500 mangos y que desde el Ministerio de Economía o desde el Gobierno digan “a nosotros no nos importa el dólar, nosotros tenemos una moneda que es muy fuerte”? ¿Qué sensación te da escuchar palabras así? Que le falten el respeto a la gente.

No tienen idea, están perdidos, no hay Gobierno. No creo en el Gobierno actual, creo que hace ya varios meses que dejaron de gobernar. Trataron de ganar un poco de tiempo, trataron de ver como acomodarse en el contexto negativo que construyeron ellos mismos. No me los tomo en serio lamentablemente. Te digo lamentablemente porque no es una boludes no tomarse en serio a un Gobierno. Uno le tiene que tener respeto al Gobierno porque eso también es parte de lo que son los mercados, nuestra vida. Cuando uno no respeta al Gobierno puede terminar mal la cosa. Lo que está pasando con el dólar y con todos los activos financieros es un reflejo de lo que pasa en la sociedad también. 

El dólar es un numerito, el peso es un papelito. Pero, todo eso tiene representaciones cuando hablás con la gente, de porqué está en ese precio. Fuera de las cuestiones técnicas: la emisión monetaria, el déficit, hay descontento. La gente se da cuenta de que algo pasa en la Argentina. 

¿Se dolariza o no se dolariza, cuál es la solución?

Se dolariza todo el tiempo, constantemente. La gente está ahorrando en dólares. Si yo tengo pesos y compro dólares, ¿qué estoy haciendo? Dolarizando. No lo quieren aceptar. Nosotros queremos formalizar la dolarización, no que se haga en el mercado blue.

 Unos dicen que sí, otros dicen que no hay reservas para dolarizar, que ganaríamos tres dólares, 5 dólares..

Eso lo dicen los que están con algún currito en la política. Los que estamos en el mercado queremos dolarizar.

¿Es factible realmente?

Por supuesto, si lo hacemos todos los días. Hay varios dirigentes, o gente que está asociada a dirigentes que no quieren aceptar que venga un espacio político nuevo y de ideas innovadoras. No tienen la capacidad de entender que todas estas ideas innovadoras tienen todas las herramientas para poder llevarlas a cabo. 

Qué diferencia tendría esta dolarización que proponen ustedes con la de los 90. 

En los 90 era una convertibilidad y podías volver atrás. En esta dolarización no vamos a volver atrás, nadie va a querer volver atrás, no va a ser necesario. Lo de los salarios en dólares, vos comparate con el resto de la región y te das cuenta lo devaluado que están los salarios, vamos a estar ganando más. 

En Ecuador, te das cuenta cómo aumentó el salario de un trabajador promedio, es impresionante, un 100%. Ganan el doble, desde que dolarizaron hace veinte años, ahora pasaron a ganar el doble. 

Me acuerdo, desde que tengo laburo, toda la vida gané mil dólares, hoy estoy ganando 550. 

Es fuerte decir lo que ganás en público, no todos lo dicen.

550 dólares pasado a pesos obviamente, no gano en dólares. 

Tendrías que volver a ganar mil dólares, ¿que te dije yo? Un 100%, ¿te diste cuenta? El calculo que hiciste vos es la pura devaluación que te hicieron con tu salario. 

¿Qué hacés con la guita que ganás? ¿La volvés a invertir o la patinás?

Yo no gasto, no soy gastador. Compro latas de atún, para empezar. No soy gastador, me gusta la inversión. 

Me imagino que te darás tus gustos igualmente. 

No soy de darme gustos, cómo afuera capaz. Me gusta comer afuera pero no estoy con el último iphone. Ahora me compré este reloj digital en Mercado Libre, me compré el más barato de todos. Soy medio ratón, no soy ambicioso por el dinero. 

¿En algún momento vas a parar y disfrutar?

La disfruto, la disfruto gastándola. La disfruto generando más dinero. Creando valor agregado. Si te dije que estaba de diez, me preguntaste cuanto estaba del uno al diez y te dije diez. No considero que disfrutarla es tirarse en una playa, capaz para otro sí, para mí no. Yo me tiro en la playa a tomar un daiquiri y me aburro. A mí me gusta laburar, estar a mil. No me divierte estar tirado en una playa. 

¿Mirás los mercados constantemente?

Sí, todos los días de mi vida, todo el tiempo. 

¿No es una obsesión?

Es como respirar, es una necesidad. Es parte de mi vida, no me imagino mi vida sin ver los mercados. Es como Boca, tengo una especie de pasión. Pero, obviamente racional porque hay que tomarse los mercados con respeto, no es un juego. 

¿Qué le decís a la persona que le sobran 50 lucas por mes? ¿Qué hace con esa plata?

Que trate de cuidar el valor de esa plata. 50 lucas en pesos, es un peligro eso. Que entienda que esa plata tiene que conllevar, tiene que recordar que le conllevo un esfuerzo para lograrla, no vino de arriba. Es muy difícil que tengas plata de arriba. La plata se gana por laburo. Si uno tiene la suerte de tener una herencia, ahí hay que respetar el esfuerzo que hizo la persona que te dió esa herencia. Tampoco porque lo hizo mi papá o mi abuelo lo voy a desvalorizar. Es parte de un valor, hay que respetar eso y hacer valer ese dinero. Poder invertirlo , generar una rentabilidad y ayudar a que la economía fluya y crezca. 

Lamentablemente, en Argentina, con esta moneda es difícil muchas veces pensar esas cosas y por eso estamos todo el tiempo hablando del dólar. 

El mercado de capitales y mi rol como broker de bolsa es eso. Fomentar que la economía crezca a través del financiamiento, de los que tienen un sobrante y los que necesitan una inversión para desarrollar su negocio. 

¿A quién vas a votar?

A La Libertad Avanza, Javier Milei presidente. 

¿Tiene chances?

Siento que sí, por lo que vemos en las encuestas, por lo que dice la gente en la calle y por lo que proponemos, entiendo que tenemos. 

¿Qué puesto estarías ocupando si llega a ganar Javier?

Broker de bolsa capaz, si soy feliz dije. Imaginate en un país liberal.

Hoy sos legislador.

Hoy soy Diputado. Ser Diputado me da la posibilidad de seguir desarrollandome en el sector privado. 

¿Irías por lo mismo?

No estoy desesperado por un cargo. Estoy desesperado por que la Argentina cambie de rumbo. Después, lo otro llega solo. Si tiene que llegar, si no tiene que llegar no tiene que llegar. 

¿Considerás que el gobierno de Alberto se devaluó por la pandemia o hubiese sido un fracaso igualmente?

Un fracaso igualmente. La pandemia lo dejó en evidencia mucho más rápido, la forma de pensar.

¿Tendría que haber seguido a Mauricio? ¿O esos cuatro años fueron más que suficientes?

Tendría que haber visto un cambio la Argentina. No está bueno todo el tiempo volver atrás. Yo soy menemista. En el 2003 lo voté a Menem. Es la única vez que lo voté por mi edad. No lo voté como menemista, me costó. No está bueno que un tipo que se fue en el 99 se vuelva a presentar en el 2003. En eso banco a los yankees, es difícil que un Presidente vuelva. Es raro que Donald Trump ahora quiera ser candidato, los yankees no actúan de esa manera, ya está, fuiste papá. Ahora da conferencias por el mundo, debatí, pero no me rompas más las bolas. No podemos depender de individuos. Ya llegaste, fuiste. Bueno, el próximo. Macri obviamente se presentó a una reelección, le fue mal, pero hubiera estado bueno una reelección.