Justo al tiempo en que se conocía el récord de muertes al cual llegó la Argentina este jueves luego de más de un año de pandemia, Juntos por el Cambio difundió un comunicado donde anunciaba su visto bueno a la postergación de las PASO y las elecciones generales, un tema que predominó en la agenda política de los últimos meses.

La noticia pasó casi desapercibida: tal vez por la gravedad que ha tomado la segunda ola, tal vez porque la decisión sembró tensiones hacia adentro de la coalición opositora, que ve en este paso un triunfo del ala blanda.

En cualquier caso, las elecciones primaverales son prácticamente un hecho: las PASO se llevarían a cabo el 12 de septiembre y las generales el 14 de noviembre. Resta la aprobación en el Congreso, lo cual a esta altura se da por descontado.

En relación a esto, Juntos por el Cambio solicitó agregar una cláusula “cerrojo” al proyecto para garantizar “el respeto de la legislación electoral vigente”, una de las banderas más agitadas por el ala dura, que reza: “La presente ley no podrá ser modificada ni derogada durante el año calendario en curso, en tanto, regula un derecho subjetivo de los partidos políticos, instituciones fundamentales del sistema democrático, a elegir sus candidatos a los cargos electivos previstos en la Constitución Nacional".

Además, informaron que elevaron su “propuesta para la implementación de la Boleta Única, ya que significa mayor transparencia, menos personas movilizadas en las elecciones, menos manipulación de papel, ahorro de transporte y menos miembros en el comando electoral". Esto es prácticamente declarativo: la opción fue descartada por el oficialismo desde el inicio de las negociaciones.

Asimismo, la principal fuerza opositora aseguró que le acercó al Gobierno otra serie de ideas, que incluyen el "restablecimiento del voto adelantado para argentinos en el exterior y personal del comando electoral, la creación de una comisión de seguimiento del Proceso Electoral y otras propuestas cuyo objeto es garantizar un proceso electoral transparente".

De esta manera, Juntos por el Cambio evitó mostrarse débil a pesar de la concesión electoral, en un contexto de alta crispación por las clases presenciales y el manejo de la pandemia.

Puertas adentro, es un triunfo de Horacio Larreta sobre Mauricio Macri, quienes mantuvieron un cónclave en secreto antes de lanzar el comunicado, el cual incluso llegó a manos de la prensa antes de ser publicado oficialmente. La disputa por el liderazgo del espacio continúa, aunque todo parece indicar que el jefe de gobierno porteño lleva por estas horas la delantera por una cabeza.