Uso medicinal, ¿recreativo? y exportación: por qué vuelve el interés oficial por el cannabis
En la política argentina, aquel enfoque conservador y prejuicioso que existía sobre el cannabis está en revisión, y se encuentra en camino a ser desarraigado y extirpado. Esto se debe a que el cannabis se utiliza cada vez más para tratar diversas enfermedades.
En ese sentido, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, aseguró que la planta de marihuana “es virtuosa, es fantástica”. Pero esta concepción no sólo queda plasmada en una mera frase calificativa. Durante la gestión del mandatario radical se creó Cannava. Se trata de una empresa estatal que cultiva cannabis (por ahora, se plantaron 35 hectáreas) y que ya fabricó el primer producto para uso medicinal en Argentina.
El mandatario provincial tiene en mente una serie de proyectos de cara al futuro: para 2022 prevé que Jujuy tenga 600 hectáreas cultivadas y para el 2023, unas 2000. Sin embargo, fue cauto al sostener que “por el momento” no está a favor de la desregulación de la marihuana para consumo recreativo.
El líder jujeño de Juntos por el Cambio, en ese sentido, admitió que “va a llegar un punto en el que se va a desregular en todo el mundo”, y agregó que “las Naciones Unidas ya la eliminaron de la lista de psicotrópicos y narcóticos”.
“Por ahora estamos sólo con cannabis medicinal”, confirmó Morales. Pero Jujuy no descarta, mediante una eventual ley aprobada, transformarse en un polo exportador de marihuana hacia países que ya tengan habilitado su consumo recreativo.
“En diez años vamos a reemplazar el tabaco por la producción de cannabis”, respondió contundente Morales a elDiarioAR.com, al ser consultado sobre si la producción de marihuana con fines medicinales tiene impacto en la economía provincial. Y argumentó que el tabaco “es más dañino y mucho menos rentable”.
El gobernador no dudó en afirmar que se trata de un “proyecto insignia” que “va a generar más renta que el litio y la energía renovable juntas”. Además, resaltó: “No te agota el suelo como la soja”. Y agregó: “Estamos por firmar un convenio con Estados Unidos porque para combatir las patologías que deja el Covid se habla del aceite de cannabis”.
Teniendo en cuenta que en Argentina hay personas presas por cultivar con fines medicinales, el radical sostuvo que “hay que ir por los grandes ‘narcos’ que venden pasta base o cocaína”.
“Nuestro proyecto le va a dar solución a las familias que necesitan el aceite para sus hijos, y lo compran de mala calidad y en el mercado negro”, finalizó.
Una línea similar en la Casa Rosada
“El cannabis medicinal es una industria global naciente con perspectivas de crecimiento”, aseguró el ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas. En ese plano, sostuvo que el objetivo de Casa Rosada es “avanzar en una apuesta estratégica del sector a partir del diseño de un nuevo marco legal de regulación y promoción”.
Kulfas sostuvo que la Argentina puede desarrollar la industria del cannabis, porque cuenta con “altas capacidades tecnológicas en materia agrícola y una extensa red de laboratorios públicos y privados”.
“Es una gran oportunidad para generar empleo en todo el país, aumentar las exportaciones y movilizar actividades de alto valor agregado”, se entusiasmó el titular de la cartera productiva. Y añadió que “el sector privado tiene que tener un rol importante sobre todo en materia de inversiones”.