El candidato a diputado nacional por “La Libertad Avanza” por la Ciudad de Buenos Aires Javier Milei protagonizó en los últimos días una polémica por su posición respecto al aborto, al comparar el vínculo de una madre y su bebé con “un conflicto de propiedad”. Esta postura, que expresó en el debate de los candidatos porteños, no fue la primera controversia que expuso respecto a temas familiares. Hace tres años dijo que sus padres “no existen” y que el vínculo entre padres e hijos “es un accidente”.

Pese a que está en vigencia desde el 14 de enero del 2021 la legalización de la Interrupción Voluntaria del Embarazo hasta la semana 14, Milei expresó sus ideas sobre el tema en el debate de los candidatos porteños. 

Allí, expuso su postura en contra del aborto salvo en caso de riesgo de vida para la madre y se refirió a la relación madre-feto como un “conflicto de propiedad”. Sostuvo: “La única forma en que avalo el derecho al aborto es con riesgo de vida de la madre, porque hay un conflicto de propiedad".

Posteriormente, al intentar explicar sus declaraciones, volvió a comparar el cuerpo de una madre con una “propiedad” y calificó de “asesinato” la interrupción de un embarazo.

"Estoy de acuerdo con el aborto cuando la madre corre peligro de vida. El bebé es otra persona", dijo y recurrió a polémicas comparaciones al afirmar: "Si alguien viene a robar a tu casa, recurrís a la fuerza, si tu vida corre peligro. Ahí es cuando corre riesgo la propiedad. Es igual que si una madre corre peligro. Ahí estoy de acuerdo porque hay un conflicto de propiedad, que sería el cuerpo de la madre".

Dadas las características bajo las cuales se genera hoy la interrupción es un asesinato”, afirmó en ese momento y se opuso al aborto en caso de violación al sostener: “¿Por qué un delito se compensa con otro delito?”.

Estos dichos controversiales no fueron los primeros que formuló el candidato Milei.

Hace tres años, en junio de 2018, durante una entrevista televisiva, el economista liberal se refirió a sus padres con fuertes epítetos y comparaciones insultantes.

Yo no hablo con mis progenitores. No les digo padres porque no comparto los valores morales y éticos de ninguno de los dos. Mi padre me hizo las mil y una en mi proceso universitario”, dijo en ese momento. “Para mí es como que ya no existen. Para mí, los dos están muertos”, lanzó.

Pero fue más allá al citar al exsecretario de Estado norteamericano Henry Kissinger. “Para mí fue una gran experiencia (la relación con sus padres). Kissinger dice que los mejores momentos son los de crisis porque los cagones se van y los incompetentes se van. Se quedan los que saben y tienen bolas. Yo puedo estar bajo la máxima presión donde nadie soporta nada y yo resuelvo como si nada. Dentro de todo ese hostigamiento me fortaleció”, dijo.

Por último, recurrió a la terminología económica para referirse al vínculo entre padres e hijos. “Los padres siempre tienen un contrato previo a nuestra existencia. Que a vos te toque un vínculo sanguíneo es un accidente”.