Javier Milei asumió este domingo como nuevo Presidente y se hizo cargo del décimo Gobierno elegido por la voluntad popular desde el regreso de la democracia, hace 40 años. La ceremonia se inició en el Congreso Nacional, donde la Vicepresidenta saliente, Cristina Kirchner, le tomó juramento ante la Asamblea Legislativa, para que luego el mandatario saliente, Alberto Fernández, le entregara la banda y el bastón.

En un ritual de traspasos que se realizó en 1983, 1989 y 1995 cada seis años y luego cada cuatro, excepto en 2001, cuando debió repetirse en más de una ocasión debido a la designación de sucesivos presidentes en medio de la peor crisis económica en la Argentina, la Asamblea Legislativa fue el comienzo del recorrido hacia la Casa Rosada para el “León” libertario.

Antes de la llegada del Presidente electo, la Asamblea comenzó con el nombramiento de los legisladores que integraron las comisiones de Interior y Exterior, los encargados de recibir en la explanada a Milei y a su vice, Victoria Villarruel. Luego, la ceremonia pasó a un cuarto intermedio, hasta que llegó el binomio que comandará los destinos del país hasta 2027.

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Por la mañana, la escolta presidencial del Regimiento de Granaderos a Caballo "General San Martín" recogió a Milei en su residencia del Hotel Libertador, en el centro porteño, para acompañarlo hasta el Congreso de la Nación. Ese recorrido se realizó sobre las 11:30 junto a tres representantes de las Fuerzas Armadas: la Marina, el Ejército y la Aeronáutica.

Alrededor de las 12, el Presidente electo arribó al Palacio Legislativo, donde lo recibió la Comisión del Exterior sobre la explanada de la avenida Entre Ríos. Desde allí, lo escoltaron al Salón Azul, lugar donde, con su compañera de fórmula y orientados por Cristina Kirchner, firmaron los Libros de Honor del Senado y de la Cámara de Diputados. 

“Viva la libertad carajo”, escribió el líder libertario debajo de su firma, ante lo que la ahora exvicepresidenta opinó en voz alta: “Es con dedicatoria”. Por su parte, Villarruel eligió el mensaje “todo por Argentina”.

Ya junto con Villarruel, fue conducido al recinto por la Comisión del Interior, para proceder oficialmente a la jura.

La Vicepresidenta saliente le tomó juramento a ambos gobernantes de La Libertad Avanza. Tras la salida de la exmandataria, Villarruel quedó a cargo de la Asamblea, y agradeció la presencia nacional e internacional. El Escribano Mayor de Gobierno leyó el Acta correspondiente.

El traspaso de insignias estuvo en manos, sobre las 12:30, de Alberto Fernández, quien le entregó a su sucesor la banda y el bastón de mando, especialmente diseñado para cada presidente. Ese es, simbólicamente, el acto de investidura formal aunque, a diferencia de la jura, la entrega de los atributos presidenciales no están previstos de manera legal. Esta última tradición quedó fijada en 1960.

En tanto, el protocolo de la jura sí está dispuesto en el artículo 93 de la Constitución Nacional: “Al tomar posesión de su cargo, el Presidente y Vicepresidente prestarán juramento, en manos del titular del Senado y ante el Congreso reunido en Asamblea, respetando sus creencias religiosas”.

En ese acto prometieron “desempeñar con lealtad y patriotismo” el cargo "y observar y hacer observar fielmente la Constitución de la Nación Argentina".

Una vez que Milei y Villarruel firmaron el Acta Notarial ante el Escribano General de la Nación, el nuevo Presidente procedió a dar el discurso de inicio de su mandato presidencial, que no fue ante la Asamblea, como es habitual. En esta ocasión, Milei dijo algunas palabras desde las escalinatas del Parlamento hacia la Plaza del Congreso. Esta iniciativa imitó a las ceremonias de los mandatarios de Estados Unidos, que hablan a la ciudadanía en el frente del Capitolio.

Posteriormente al discurso, a las 13, Milei se subió a un Valiant III descapotable junto a su hermana, Karina Milei, mientras que Villarruel abordó otro vehículo, y la caravana bajó por la Avenida de Mayo hasta la Casa de Gobierno. En algunas oportunidades el Presidente se bajó para saludar a la multitud que lo acompañaba.

En la entrada de la Casa Rosada, sobre la calle Rivadavia, el nuevo mandatario fue recibido por el jefe de la Casa Militar, el director de Ceremonial y un edecán del Presidente saliente, quienes lo acompañaron hasta el Salón Blanco. Allí, Milei debe cumplir el protocolo de recibir el saludo de las delegaciones extranjeras que lleguen a Buenos Aires para saludarlo.

Llegará así el momento en que el Mandatario saliente se despedirá de su reemplazante y se retirará en conjunto con sus exministros, acompañado hasta la puerta de la Rosada por el jefe de la Casa Militar entrante, el director de Ceremonial y un edecán del nuevo gobernante.

Alrededor de las 17.30 se desarrollará la ceremonia de jura de los ministros y principales secretarios de Estado en la sede gubernamental, mientras que está previsto que Milei asista a una misa interreligiosa en la Catedral Metropolitana. Inicialmente, se prevé para las 19, pero el horario podría modificarse. 

Su actividad oficial va a terminar con una función especial en el Teatro Colón, en la noche del domingo, a la que están invitadas varias de las figuras internacionales que asistirán al traspaso de mando.

Quienes confirmaron su presencia en la ceremonia de la Casa Rosada, y a quienes se vio en el interior y en las escalinatas del Congreso durante el discurso presidencial, son los mandatarios Volodimir Zelensky (Ucrania), Luis Lacalle Pou (Uruguay), Santiago Peña (Paraguay), Daniel Noboa (Ecuador), Gabriel Boric (Chile), Vahagn Jachaturián (Armenia) y Viktor Orbán (Hungría).

También, el rey Felipe VI de España; el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro; el canciller de Israel, Eli Cohen; y el británico David Rutley, ministro a cargo de las Américas y con rango de vicecanciller.