Después de que Eduardo Duhalde se presentara como el impulsor de la unidad total y pusiera toda su energía para alinear a Cristina Fernández de Kirchner detrás de Roberto Lavagna, en la mañana del sábado trascendió la existencia de una creciente irritación del expresidente con el economista.

Tras el esfuerzo por negociar el acercamiento con figuras kirchneristas, aseguró puertas adentro que el aplazamiento de la definición del exministro distancia a los posibles adláteres y debilita su posible candidatura de cara a octubre.

El enojo de Duhalde con la lentitud de Lavagna y la fuga de aliados hacia la nueva Cristina

A 45 días del cierre de listas, continúan las conjeturas sobre la presentación de una alianza en la que participe Lavagna, sobre el cargo al que podría postularse y respecto a quiénes serían sus compañeros de boleta. 

Luego del guiño de la nueva y moderada Cristina en la presentación de su libro en La Rural y tras descartar la posibilidad de competir dentro de Cambiemos, Lavagna retrocedió y volvió a coquetear con Miguel Ángel Pichetto

El enojo de Duhalde con la lentitud de Lavagna y la fuga de aliados hacia la nueva Cristina

Con cumplidos y elogios, el economista calificó como viable la posibilidad de que el senador por Río Negro sea su compañero de fórmula y Pichetto respondió positivamente a la propuesta para ir como vice.

Pero las vueltas en torno al tema enojan mucho a Duhalde, quien ya se había encargado de reforzar su principio de no marcarle límites a la unidad opositora y abrirle las puertas del peronismo federal a varias figuras de todos los espacios, inclusive a Martín Lousteau, José Luis Espert, Alfredo Olmedo y hasta a los radicales y la izquierda.

El enojo de Duhalde con la lentitud de Lavagna y la fuga de aliados hacia la nueva Cristina

Pero sin determinaciones y con un obvio desgaste interno producto del paso del tiempo, algunos nombres del kirchnerismo que se habían acercado en aras de formalizar acuerdos, volvieron a escaparse después de que el economista mantuviera su posicionamiento de definirse recién a mitad de año.

Mientras que la expresidenta esconde sus cartas y en Alternativa Federal confluyen más en contradicciones y límites que en intención de voto, los protagonistas siembran incertidumbre en público y Duhalde brega por que se mantenga firme el visto bueno de la senadora, algo que considera primordial para el futuro electoral del PJ federal.