El ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, adelantó este domingo que la baja de la edad de imputabilidad es uno de sus objetivos para 2024 y detalló que “al margen del delito en particular cometido, el chico muestra ya una conducta desviada, una conducta socialmente disvaliosa, a partir de los 14” años. Además, indicó que la lucha contra la corrupción es “prioridad” y advirtió: “Vamos con todo”.

En relación a la baja de la imputabilidad de 16 a 14 años, el abogado remarcó: “Es la edad que me gusta, y es la que sostienen casi los 30 proyectos que tengo arriba de mi escritorio, que se han presentado y no han tenido acogida legislativa”. A su vez, indicó que la baja de la misma sería para todo tipo de delitos “porque el chico, sea un hurto, robo, abuso, demás, ya muestra una personalidad que merece la atención y sanción”. 

“Dividir según los delitos, y dejar algunos sin castigo o educación, que es lo que yo pretendo, carece de sentido. No importa cuál sea tal delito, ese chico merece cuidado, atención, reeducación, trabajo y formación”, sostuvo al respecto, en declaraciones a Radio Rivadavia.

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A su vez, Cúneo Libarona focalizó en la necesidad de “un sistema procesal distinto” según la edad y advirtió: “No podés hacer el mismo juicio a un mayor que a un menor, tiene que ser un tribunal especializado, con asistencia, defensa, cuidado tutelar al menor, con cuidado a la víctima también. Hay que cuidar al imputado y a la víctima en esencia general. Tiene que tener otro sistema rápido, mucho más rápido de juicio de mayores, etcétera”. 

“Lo que yo quiero enfatizar en los menores es la reeducación, resocialización, obligación de estudio, obligación de trabajo, porque esos chicos tienen la posibilidad que tal vez otros no tuvieron, de poder volver a reinsertarse a la sociedad adecuadamente”, puntualizó. 

En este sentido, aseguró que no cree en la sanción al menor y reiteró: “Démosle una oportunidad, eduquémoslo, no hagamos como el mayor de 50, que ya tiene su personalidad formada y metámoslo en la cárcel así nomás”. 

Por otra parte, detalló que su plan consta de tres etapas: prevención, para “tratar de evitar el delito”; juicio rápido “con reglas especiales, punibilidad”; y reinserción social y la educación del menor condenado. “Si no, no me sirve el sistema. No me sirve a un chico meterlo en un lugar que sea un desastre”, advirtió.

En cuanto a la lucha contra la corrupción, afirmó que es “prioridad” al igual que el narcotráfico y la trata, y destacó: “Vamos con todo y la gente que me conoce lo sabe, yo soy el único ciudadano en la Argentina que denunció seis jueces federales y logré la destitución”. 

“Estamos ya trabajando dos o tres cuestiones que descubrimos que se van a denunciar, de distintos partidos”, adelantó. Sin embargo, hizo hincapié en el rol que le atañe e indicó: “Nosotros, a través de la Oficina Anticorrupción haremos todas las denuncias que sean necesarias, pero no somos un órgano persecutorio”.

“Para eso está el ministerio Público, que igual que los jueces es otro poder, donde nosotros no podemos, por una cuestión de división de poderes, interferir. Yo puedo hacer la denuncia”, remarcó.