Crece el malestar de China por los "camiones para el COVID" y esperan una explicación pública de Petri
La embajada del gigante asiático en Argentina aseguró que el ministro de Defensa “tiene muy claro el propósito de este lote de materiales”.
Después de la irónica conferencia de prensa del viernes del vocero presidencial, Manuel Adorni, en la que anunció que habían llegado "un poco tarde 30 camiones" de China para "enfrentar al COVID", la embajada del gigante asiático en Buenos Aires sostuvo que se trata de una "información completamente incorrecta" y que el ministro de Defensa, Luis Petri, "tiene muy claro el propósito de este lote de materiales".
Las declaraciones del portavoz causaron sorpresa y controversia. El viernes, desde la Casa Rosada, Adorni no sólo anunció el arribo de los vehículos, sino que también apuntó contra Alberto Fernández por "la gestión de la pandemia" y hasta se animó a ironizar con el presidente asiático Xi Jinping.
"Agradecemos a Xi Jinping por esta generosa donación y prometemos usarlos... No para el COVID, pero sí para mejores fines", afirmó.
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La administración asiática se hizo eco de los dichos del vocero presidencial y respondió a través de un contundente comunicado que publicó su embajada, desmintiendo al funcionario y apuntando contra el ministerio de Defensa.
"No conocemos la fuente de información que mencionó, pero es información completamente incorrecta. Estos camiones son instalaciones logísticas de hospitales móviles de asistencia gratuita de parte del ministerio de Defensa Nacional de la República Popular China para la Argentina", remarcó.
Asimismo, aseguró que Defensa "tiene muy claro el propósito de este lote de materiales", que "no tienen nada que ver con los supuestos camiones para enfrentar al COVID que han llegado con cierto atraso".
En campaña, el por entonces candidato presidencial Javier Milei había mostrado intenciones de romper las relaciones diplomáticas con Beijing. Antes de sentarse en el sillón de Rivadavia, el liberatario acusaba de "asesino" a Xi Jinping y proclamaba que el pueblo de aquel país "no es libre".
Como respuesta, la portavoz del ministerio de Exteriores Mao Ning había dicho que "sería un grave error de política exterior para Argentina cortar los lazos", ya que su país es "un importante socio comercial".
Sin embargo, días después de asumir, el líder de La Libertad Avanza se contactó con Xi Jinping para renovar el acuerdo swap y se retomó el diálogo, aunque las relaciones siguen marcadas por la tensión.