En medio de la polémica por la seguridad de Fabiola Yáñez en España, que el presidente Javier Milei pretende suprimir, Patricia Bullrich reveló este sábado que la exprimera dama "se escabulló" de la custodia que le paga el Estado el pasado 31 de diciembre, cuando se la vio en un exclusivo restaurante de Madrid compartiendo una cena para recibir el Año Nuevo.

"El día 31, la señora Yañez había dicho que no iba a salir y se escabulló de la custodia", sostuvo la ministra de Seguridad en declaraciones televisivas.

"La custodia después se enteró por una foto en Instagram que estaba en un lugar. La llamó por teléfono en infinidad de oportunidades y no atendió", relató Bullrich. "Luego sí lo hizo y dijo 'bueno, si quieren, me vienen a buscar'. Pero directamente se escapó de la custodia", insistió.

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En esa línea, la Ministra precisó que la custodia en la capital española le cuesta al Estado € 23.000 mensuales ($24.000.000, aproximadamente). 

"El lunes vamos a presentar un informe a la Justicia (para que se retire esa seguridad) y creemos que va a ser positiva la respuesta. Fabiola además está fuera del país, lo que representa un montón de dinero. Luego vamos a hacer un ordenamiento muy estricto de todas las custodias", declaró la funcionaria.

Bullrich argumentó que el hecho de estar custodiado "significa que hay riesgo de que algo puede ocurrir en cualquier circunstancia, en cualquier lugar", pero explicó que Yáñez usa el servicio por elección y cuando le conviene. 

"Una de las cosas que la Justicia planteó es que el expresidente Alberto Fernández intentó acercarse a su exmujer en varias oportunidades y hoy eso no puede suceder porque él está en Argentina y tiene prohibido salir del país", añadió.

El video en el que se la vio cenando tampoco le salió gratis a la exprimera dama en la batalla judicial que libra con el exmandatario, al que le inició una causa por violencia de género. Si bien pidió que se mantuviera la seguridad en Madrid para su exmujer y el hijo de casi 3 años que tienen en común, el exjefe del Estado aprovechó la circunstancia para reclamar la restitución de Francisquito, al señalar que el menor no se encontraba en la cena y puntualizar que no se sabe quién lo cuidaba esa noche.

"Francisco no estaba en la cena. No sé dónde estaba, ni quién lo cuidaba, mientras su madre festejaba bebiendo alcohol y disfrutando buenos platos. Nuestro hijo no pudo celebrar las festividades junto a su padre por el deseo unilateral y arbitrario de su madre", consideró Fernández en una denuncia por amenazas que presentó en las últimas horas contra la también periodista, que acompañó con un audio en el que se los escucha discutiendo telefónicamente.