Bajo perfil, de familia militar y fanática de Sinatra: Inés Pertiné, la viuda de Fernando De la Rúa
Inés Pertiné ingresó al Congreso de la Nación a las 15 y recibió las condolencias de Mauricio Macri y Juliana Awada, en el Funeral de Estado que se organizó para despedir a su viudo, Fernando De la Rúa, presidente del país entre 1999 y 2001. De 76 años, familiera y comprometida con la acción social durante el mandato del dirigente radical, se mantuvo a su lado hasta el final.
Se conocieron en 1966, en un día de campo que tuvo lugar en la finca de Magdalena Estrugamou -amiga suya del colegio Asunción, hoy San Martín de Tours-, y desde allí nunca más se separaron. El 15 de diciembre de 1970, se casaron en la Iglesia del Pilar, en el epicentro de Barrio Norte, donde Inés vivió toda su vida. Tuvieron tres hijos: Agustina, Antonio y Fernando "Aíto".
Proveniente de una familia de clase alta y con fuertes lazos militares, era nieta del general Basilio Pertiné, ministro de Agustín P. Justo, hermana del contraalmirante Basilio Pertiné, agregado naval en Washington en la última dictadura y luego con Raúl Alfonsín, y sobrina de César Urien, secretario de Agricultura de Arturo Frondizi y embajador en España en el gobierno de facto de Juan Carlos Onganía.
Habla inglés y francés, en tanto no concurrió a la universidad. De tradición católica, solía ir tres veces por semana a misa. Siempre mantuvo un perfil bajo, ajena a las declaraciones públicas y mucho más a las polémicas.
Fanática de Frank Sinatra, lectora de Isabel Allende y con los lentes oscuros infaltables en su look, cuando De la Rúa gobernó el país se desempeñaba en la Fundación Centro de Estudios por la República, donde atendía problemas sociales.
"Para lo único que sirve el poder es para ayudar a la gente", aseguraba en ese entonces. A lo largo del gobierno del extinto presidente, viajó por distintas ciudades del país para entregar pensiones.
"Siempre ayudé a mi esposo desde el llano. La vida política de Fernando fue muy intensa y yo me dediqué a los hijos. Me aboqué a cuidar de mi familia, que fue, es y será lo más importante en mi vida y por la cual nos hemos mantenido tan unidos y solidarios. El hogar es el refugio de Fernando y eso es lo que me importa preservar", aseguró ante La Nación en el 2000, en una de las pocas entrevistas que concedió.
Su último reportaje público se dio por casualidad. El 15 de septiembre de 2016, al humorista Jey Mammon se le ocurrió llamar a De la Rúa para saludarlo en vivo por su cumpleaños, en el programa de radio Jey Jey Jey, que se emitía por Radio Con Vos. Tras rastrear en la guía telefónica, dio con el número correcto. Pero quien atendió fue Inés Pertiné.
En un diálogo divertido y ameno, comentó detalles del cumpleaños de su viudo. "Estamos pasándola bárbaro, es un día muy lindo en familia. Ahora, Fernando se fue a almorzar con unos amigos del Senado para quedar bien", relató, y agregó: "Hasta ahora no le regalé nada. Es muy lector. Un libro es un gran regalo para él".