La senadora nacional y precandidata a vicepresidenta por el Frente de Todos, Cristina Fernández de Kirchner, realizó esta tarde una nueva escala por el país para presentar su libro Sinceramente. En Río Gallegos, reveló que Néstor Kirchner relativizó la crisis económica del 2001 y fue uno de los que sufrió el corralito que implementaron Fernando De la Rúa y Domingo Cavallo.

En la ciudad natal de su viudo, fallecido a finales de octubre de 2017, Cristina rememoró los diálogos que mantenía con el expresidente en ese entonces, cuando el Ejecutivo dispuso la limitación a la libertad para tener dinero en efectivo en los bancos por parte de los titulares de las cuentas.

"Todo el 2001 le martillé la cabeza a Néstor. Le decía: 'Saquemos la plata de los plazos fijos y mandémosla afuera'. El tipo había dejado su plata acá. '¿No viste las tasas que están pagando?', me decía, y yo le expliqué que no la iban a devolver. 'Pero vos estás loca, si no la devuelven se incendia el país', me dice, porque él era el que sabía economía. Y se incendió. Durante una semana entera le estuve diciendo: 'Te lo dije, te lo dije'", relató, ante las risas de los más de 2.000 presentes.

La Argentina había llegado a esa situación por una política de sobreendeudamiento, que degeneró en una falta de liquidez y una masiva fuga de capitales. En los 11 primeros meses de 2001 se retiraron US$ 18.000 millones debido a la enorme desconfianza de los ciudadanos en la solidez de las entidades.

Un año más tarde, el 2 de diciembre de 2002, se anunció la liberación de los depósitos retenidos, se dispuso el fin de la equiparación peso/dólar y se inició la devaluación. Por aquellas medidas, De la Rúa y varios de sus ministros fueron imputados judicialmente por negligencia política y económica, aunque luego fueron sobreseídos.