En la tarde del domingo, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner adelantó que en la mañana del día siguiente, su abogado defensor en la causa de Vialidad, Carlos Beraldi, alegaría ante los jueces del tribunal y anticipó: “Escuchá atentamente cómo desnuda la farsa guionada de los fiscales Luciani y Mola. ¿Lo transmitirá Clarín y La Nación?". Con todas las miradas puestas en su discurso, el magistrado comenzó a hablar después de las 8 de la mañana del lunes. ¿Qué es lo que argumentó?

Causa previa. Entre los principales fundamentos del abogado de CFK estuvo que los hechos por los cuáles está siendo investigada ya fueron objeto de otra investigación previa. En 2008, el juez Julián Ercolini se declaró incompetente y la causa quedó en manos de jueces provinciales de Santa Cruz. “En los dos procesos, tanto el que había venido del juez Ercolini, como el que se había iniciado en la justicia federal de Santa Cruz, terminaron siendo desestimados. En un caso fue dictado el sobreseimiento de las personas, con un argumento: que no existía delito”, explicó Beraldi.

¿Toneladas? El abogado de la dos veces presidenta rechazó las declaraciones del fiscal Diego Luciani, cuando en su alegato se refirió a las “toneladas” de pruebas que había en contra de la exmandataria. Para el defensor, esas pruebas no se demostraron en ninguna de las nueves jornadas donde habló el fiscal. “No se puede hablar de ‘prueba contundente’ porque la prueba haya sido pesada. Ninguno de los jueces y colegas sabe que la prueba es contundente por el peso en gramos que pueda tener”, chicaneó.

Verdad y persecución. En otro pasaje, Beraldi comparó a la Vicepresidenta con la persecución ejercida sobre el fundador del movimiento político que contiene a su representada. “A Perón le hicieron un proceso por traición a la patria y asociación ilícita, lo mismo que a Cristina”, señaló. Para el abogado, "cuando uno busca la verdad, tarde o temprano esa verdad aparece"; por eso, planteó que "la verdad siempre triunfa y eso es lo que ocurrió en este juicio", dado que "quedó demostrado" que la acusación "carecía de verosimilitud" y fue "falsa y sin fundamentos".

Irregularidades. Entre ellas, el magistrado e integrante del consejo consultivo jurídico del Presidente recordó cómo la esposa del juez Ercolini “trabajaba como vocera del entonces ministro (de Justicia Germán) Garavano”, algo que denunciaron en su momento como una “indebida intromisión del poder político”. En 2019, la defensa recurrió a la Corte Suprema, que pidió el expediente de inmediato. Sin embargo, Beraldi marcó que al instante “hubo un gran escándalo mediático, un grupo de vecinos fue a tocar las cacerolas, y entonces la Corte retrocedió: pidió el expediente, sonaron las cacerolas y retrocedieron”.

Después de ello, según la defensa, las irregularidades siguieron. “Existieron actividades privadas de fiscales y jueces”, sostuvo en alusión a los partidos de fútbol de los fiscales y jueces de la causa en la quinta de Los Abrojos, de Mauricio Macri. “Jugamos un partido en cancha inclinada”, repudió.

Rumbo indeseable. Beraldi también denunció que, “como no tenían ninguna imputación”, los acusadores se fijaron “cuáles eran los empresarios de la obra pública”. Pero como una de las empresas era Iecsa, de la familia Macri, el abogado de CFK supuso que “esto preocupó a la gente de (Javier) Iguacel porque habían ido a investigar a Cristina Kirchner y la investigación tomó un rumbo indeseable” para ellos. “Habían ido por lana y volvieron esquilmados”, ilustró el magistrado, quien para dejarlo más en claro agregó: “Habían ido por Cristina, pero se encontraron con Macri”.

Presupuesto. Por otra parte, criticó la “fantasía” de los fiscales “de que Néstor y Cristina hacían un Presupuesto para beneficiar a alguien". En cambio, refutó: "No es un proceso arbitrario, intervienen casi todos los órganos". Frente a la acusación de una supuesta actitud pasiva por parte del Congreso en la aprobación de esas hojas de ruta, Beraldi presentó testimonios de diputados opositores de ese entonces, como Margarita Stolbizer, Fernando Sánchez, Ariel Oslvaldo Passini  y sostuvo: “Ningún legislador fue presionado o coaccionado para votar favorablemente las leyes de presupuesto".

Además, presentó algunos de los proyectos que habían sido redactados por la oposición en 2010 y 2011, donde los montos y nóminas para la obra pública en Santa Cruz era la misma que la propuesta por le oficialismo. "La oposición presentaba las mismas obras y las mismas partidas, ¿cómo se sale del ríduclo?", se preguntó el defensor.