Crimen de Blaquier: las 6 pruebas que complican a los adolescentes juzgados
Las audiencias arrojaron datos claves que dificultan la situación de los dos acusados de cara al veredicto. Este lunes comienzan los alegatos.
En el juicio por el asesinato del empresario Andrés Blaquier durante el robo de su moto en octubre de 2022 en Pilar, los dos adolescentes acusados por el crimen acumularon varios datos en su contra, lo que complica su situación de cara al veredicto, que se conocerá en los próximos días. Este lunes, comienzan los alegatos de las partes, ya que la presentación de pruebas finalizó la semana pasada.
El crimen de Blaquier, de 62 años, se produjo el 29 de octubre del año pasado -a la altura del kilómetro 50 de la Panamericana- cuando los dos menores de edad interceptaron al empresario, y pese a que éste no opuso resistencia, lo balearon y le robaron la moto en la que se desplazaba. Los jóvenes iban en otra moto al cruzar al empresario y parte de la secuencia quedó registrada por cámaras de la autopista, entre otras.
Las declaraciones de las novias de los dos imputados, las heridas que sufrió uno de los acusados durante el escape del lugar del hecho, la moto utilizada por los delincuentes, las imágenes de las cámaras de seguridad de la Panamericana y los chats, son algunas de las pruebas claves que pusieron en jaque a los dos adolescentes que son juzgados.
Fuentes judiciales informaron a Télam que, al tratarse de un juicio a menores de edad, en la primera instancia solamente se determinará si los acusados son inocentes o culpables, pero no se les impondrán posibles penas. Además, en caso de que se establezca la culpabilidad, más adelante se llevará a cabo un juicio de censura para determinar las penas correspondientes.
La parte acusadora está a cargo de la fiscal de menores de San Isidro, Paula Romero, y del abogado querellante Ramiro Salaber. En tanto, la defensa es encabezada por María Paz Rodríguez Senese y Santiago Moisés.
Las seis claves de la investigación
- Las declaraciones de las novias de los imputados y las conversaciones por celular: una de ellas declaró que vio un arma en la casa de su pareja y la otra destacó que su novio obtenía diferentes motos de dudosa procedencia, presumiblemente robadas.
En los peritajes realizados a los teléfonos de los adolescentes, se encontraron audios en los que se daba a entender que ambos se dedicaban al sustracción de motocicletas, con un modus operandi similar al utilizado durante el homicidio de Blaquier.
- Las declaraciones de los amigos de Blaquier: el día del homicidio, el empresario y su mujer, con una pareja amiga, viajaban en sentido a provincia en dos motos cuando comenzaron a ser perseguidos por los motochorros. Uno de ellos efectuó dos disparos, uno al piso y el otro al pecho de Andrés Blaquier, quien se desplomó de la BMW 1200 de color negro en la que iba con su mujer.
Los amigos presenciaron la secuencia completa del robo que terminó en homicidio: dijeron en el juicio que dos delincuentes a bordo en una moto Kawasaki Z400 verde y negra comenzaron a seguirlos y que "los iban midiendo", hasta que Blaquier aminoró la marcha de su vehículo para tomar la salida a la altura del kilómetro 50 de la Panamericana.
Según agregaron los amigos de la víctima, a las 18:54 los delincuentes se pusieron a la par de la moto del empresario, dispararon en una ocasión al piso, para luego disparar "sin mediar palabra" en el pecho de Blaquier, quien perdió el control de la moto y cayó junto a su esposa. A raíz del balazo que recibió en la parte izquierda del tórax, el exdirector de Negocio Agropecuario de Ingenio Ledesma sufrió un "shock hipovolémico" y falleció, mientras que su esposa tuvo una fractura de rótula en la rodilla izquierda.
- Las imágenes de las cámaras de seguridad: a pesar de que no pudieron captar el momento exacto del hecho, pudieron ver cómo los delincuentes se escaparon sentido a Escobar, de donde son oriundos. No obstante, fuentes judiciales afirmaron que durante el juicio se logró reconstruir el recorrido de 10 kilómetros que realizaron los ladrones antes de interceptar a la víctima.
- Las heridas que sufrió uno de los acusados el día del hecho: ese 29 de octubre, uno de los adolescentes implicado en la causa se presentó en el hospital Dupuy de Garín, con lesiones en el rostro, en las rodillas y en sus manos. La querella y la fiscalía consideraron que son compatibles con el accidente de moto que tuvieron los delincuentes minutos después del crimen.
La situación coincide con el hallazgo de la motocicleta de Blaquier sobre el asfalto de la autopista Panamericana, donde uno de los dos asaltantes perdió el control del rodado y chocó minutos después del hecho: “El conductor de la moto de Blaquier pierde el control, derrapa con la misma y cae dando varios tumbos, para acto seguido subirse a la moto conducida por su consorte”.
Si bien la caída no es tomada por las cámaras de seguridad, fue relevada a través de testimonios. En consonancia, luego se ve a los dos motochorros camino a Garín, circulando a ambos en la misma moto negra y verde, y se observa que el acompañante no llevaba casco y tenía ostensibles heridas en el rostro y cabeza, según se especificó al respecto en el requerimiento de elevación a juicio.
- La comparación de rostros hecha por la Policía de la Ciudad: en el llamado peritaje de antroposcométrica, se compararon imágenes "dubitadas" que se tenían de los delincuentes escapando del lugar de los hechos con tomas "indubitadas", que fueron obtenidas luego de capturar a los sospechosos.
- El hallazgo de la moto Kawasaki y de prendas utilizadas en el hecho: durante las detenciones de los menores de edad, en noviembre del 2022, se encontraron algunas prendas parecidas a las que usaron el día del asesinato. También se encontró la moto Kawasaki Z400 en la que se protagonizó el crimen.
Las fuentes consultadas indicaron que ese vehículo tenía un pedido de secuestro porque había sido denunciada como robada el 23 de octubre del 2022, seis días antes del crimen, en la localidad de Ricardo Rojas, de la provincia de Buenos Aires.
Frente al Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil N°1 del Departamento Judicial de San Isidro, el Ministerio Público Fiscal pedirá que los acusados sean encontrados culpables de “robo agravado por el uso de arma de fuego y por resultar lesiones graves, en concurso real con homicidio criminis causae y por haberse cometido con arma de fuego”.
La condena, en caso de ser hallados culpables los dos acusados, se dará a conocer en un juicio por censura, en el cual no se podrá dictar la escala penal máxima del delito por su condición de menores de edad.