Milagros Gutiérrez tenía 18 años y era una testigo clave en una causa por abuso sexual de una menor. El viernes pasado, falleció luego de ser golpeada y violentada en el hospital San Bernardo, en la capital salteña. Según su familia, fue el acusado quien orquestó la venganza para que no pudiera dar su testimonio en el caso.

La tía de la víctima, en conversación con Todo Salta Noticias, contó que la joven estaba próxima a declarar: "Ella sabía, este tipo mandó a dos mujeres para hacerla callar y la callaron".

Según su relato, el pasado 23 de enero, Gutiérrez fue interceptada en la calle y atacada por otras dos mujeres. Debido a severos golpes en la cabeza y en la nuca, debió ser ingresada en un centro de salud y allí el calvario continuó.

"Cuando ingresó al hospital el primer día, una pasante de enfermería entró y le cortó la lengua mientras estaba internada", aseguró la madre de Milagros en Qué Pasa Salta.

"No podía alimentarse y, en solo dos semanas, su estado se deterioró completamente. Ahí no dio más. Al entrar a terapia intensiva, no soportó más", narró el trágico desenlace.

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Además, reveló que ella misma también sufrió amenazas: "Mi niña era testigo de una causa que involucra a un hombre con antecedentes por abuso. La Justicia no actúa y es por eso que mi hija terminó así. Si ella hubiese tenido custodia, estaría viva, no estaría en la morgue".

Según medios locales, hasta el momento, las autoridades del hospital San Bernardo no confirmaron ni desmintieron los dichos de la familia. Sin embargo, el primer informe de los profesionales del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) reveló que el cuerpo de la joven no presentaba signos de violencia.

Luego de la mediatización del caso, intervino la Dra. Mónica Poma, titular de la Fiscalía Especializada en Femicidios (UFEM). La letrada ordenó varias medidas para intentar entender las circunstancias de la muerte de Milagros Gutiérrez, cuyo cuerpo fue trasladado a la morgue judicial.

El diario El Intra informó que los familiares dudan del informe de la autopsia, ya que no fueron los primeros en ser informados de los resultados.