La gobernadora Kathy Hochul declaró el estado de emergencia en el área metropolitana de Nueva York, debido a las torrenciales lluvias que afectaron al estado y que, por ejemplo, obligaron a interrumpir los servicios del subterráneo en Brooklyn y del ferrocarril de Staten Island.

“Por favor, tomen medidas para mantenerse a salvo y recuerden que nunca deben intentar viajar en carreteras inundadas”, pidió la funcionaria en su cuenta de la red social X. 

"Instamos a los neoyorquinos a prepararse para fuertes lluvias y posibles inundaciones durante el viernes y el sábado por la mañana", dijo por su parte el comisionado de Gestión de Emergencias de Nueva York, Zach Iscol.

La amenaza de inundaciones afecta a unas 25 millones de personas en todo el nordeste estadounidense. El área triestatal de Nueva York se enfrenta a un nivel 3 sobre cuatro posibles, lo que implica riesgo "moderado" de inundaciones repentinas, según advirtió el Servicio Meteorológico Nacional.

En consecuencia, dejaron de funcionar las líneas B, G, F, N, R, 2,3, 4, y 5 según la MTA (Autoridad Metropolitana del Transporte). Asimismo, Metro North, que presta servicio al norte de Nueva York, suspendió temporalmente las líneas New Haven y Harlem debido a las inundaciones provocadas por la tormenta.

En el aeropuerto metropolitano de La Guarda hubo retrasos y cancelaciones y se cerraron por anegamiento las rutas en Nueva York, incluida una parte de la autopista Franklin D. Roosevelt, que recorre el lado este de Manhattan, según la Policía neoyorquina.

Brooklyn, uno de los cinco distritos que conforman la ciudad de Nueva York, experimentó el equivalente a un mes de lluvia en sólo tres horas este viernes.