Sin saberlo, un guardia de un zoológico de Tashkent, la capital de Uzbekistán, grabó su propia muerte tras ingresar a la jaula de tres leones que cuidaba y ser devorado por las fieras mientras intentaba impresionar a su novia con un video.

El trágico suceso ocurrió en el zoológico privado Parkent e involucró a un guardia nocturno de 44 años, quien entró a la jaula con el pretexto de enviarle un video a su pareja. 

Las imágenes mostraron cómo el hombre desbloqueó el candado del recinto, mientras los leones descansaban y, aparentemente, se encontraban tranquilos.

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De pronto, uno de ellos saltó y lo enfrentó, mientras el hombre daba un paso hacia atrás. Inmediatamente, los otros dos ejemplares comenzaron a acercarse al cuidador.

"Simba, Simba, cállate", le gritó el cuidador a uno de ellos, mientras le tocaba su melena. Acto seguido, uno de los leones se le abalanzó y el hombre comenzó a gritar, con la cámara todavía encendida.

La grabación se oscureció en medio de las súplicas del cuidador. Según medios de comunicación rusos, los rescatistas lograron tranquilizar a dos de los leones, pero debieron matar al tercero. Los restos del cuidador fueron encontrados despedazados minutos después.