Cerca de la medianoche del lunes, el Banco Central sacó una resolución que generó un fuerte malestar en quienes hace unas semanas se sintieron atraídos por los beneficios del dólar soja. En este caso, la entidad financiera prohibió comprar dólar ahorro a aquellos que operaron con esa cotización temporal durante septiembre. Ninguno fue avisado de antemano, y de ahí la bronca. Sin embargo, horas más tarde, el Gobierno aclaró quiénes quedarían exceptuados en la medida. ¿Cuáles son las claves para entender la decisión del Ejecutivo?

El problema. Los frutos de la implementación del dólar soja fueron celebrados tanto por el Gobierno como por el Fondo Monetario Internacional (FMI). El BCRA vio ingresar durante lo que va de septiembre cerca de U$S 4.000 millones. La entidad financiera debió pedirle financiación al Tesoro para entregarle los pesos correspondientes a los agroexportadores. Pero el Gobierno comenzó a notar que, con ese extra que implicó la suba temporal a los $200 de cotización, los beneficiarios de la medida se volcaron fuerte a los dólares financieros, como el MEP (o bolsa). Ante la presión alcista, en el Gobierno tomaron la decisión de limitarles la compra de dicho tipo de cambio y así neutralizar la suba.

La medida. Según lo dispuesto en la resolución, “los agentes económicos que hayan vendido soja en el marco del Programa de Incremento Exportador no podrán acceder al mercado de cambios para compras de moneda extranjera, ni tampoco realizar operaciones con títulos y valores con liquidación en moneda extranjera”. El nuevo cepo estará vigente desde este martes 20 de septiembre.

Enojo. En el campo pusieron el grito en el cielo. Nicolás Pino, titular de la Sociedad Rural, calificó a la medida como una “emboscada”. El productor Santiago del Solar, exjefe de Gabinete en el Ministerio de Agricultura durante el macrismo, expresó: “Es un cambio de reglas de juego a mitad camino”. Y agregó: “No lo dijeron al inicio del dólar soja, esperaron a que el productor esté o en pesos o bien en proceso de cobranza”. Por su parte, el presidente de la Cámara aceitera, Gustavo Idígoras, señaló: “Es una medida restrictiva, limitante del mercado cambiario y perjudicial”.

Aclaración. Después de la Comunicación “A” 7609, llegó la “A” 7610, donde el Banco Central aclaró que “las disposiciones dadas a conocer” en el expediente anterior “no son de aplicación para las personas humanas”. En ese sentido, el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, tuiteó: “Quiero aclarar que la resolución del Banco Central no incluye a los productores y las productoras que con tanto esfuerzo vienen acompañando el Programa al Incremento Exportador". Con ese movimiento, el Gobierno aseguró que solo las empresas y grandes cerealeras sean quienes se vean perjudicadas por la medida.