En momentos en que el Gobierno busca fondos frescos que le permitan concretar su promesa de campaña de poner final cepo y liberar definitivamente el mercado de cambios, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, participarán este miércoles en Washington de las Reuniones de Primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.

Ante potentes versiones de que Argentina podría obtener fondos adicionales de organismos internacionales para la esperada liberación del tipo de cambio entre el peso y el dólar en julio próximo, el titular del Palacio de Hacienda llevará adelante una nutrida agenda en Estados Unidos, que incluirá su presencia en los paneles y reuniones de ambas entidades financieras y del G20.

Además, junto al secretario de Finanzas, Pablo Quirno, Caputo tiene previsto mantener reuniones con representantes del FMI y del Tesoro estadounidense, en las que se profundizará el diálogo sobre las reformas que se están desarrollando en el país para ordenar la economía.

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Con el objetivo de  acercar posiciones para delinear un nuevo acuerdo que habilite en los próximos meses un mayor desembolso de dólares para el país, el titular de Economía también participará en los encuentros del Comité Monetario y Financiero Internacional (CMFI) y el Comité Ministerial Conjunto para el Desarrollo (CD) del FMI y el Banco Mundial.

El enfoque de estos eventos se centra en la economía mundial, la evolución de los mercados financieros, así como en debates sobre los recursos financieros necesarios para promover el desarrollo económico y la reducción de la pobreza en los países en desarrollo. 

En tanto, Posse tiene previsto -además de los intercambios con representantes del Tesoro de Estados Unidos- desarrollar reuniones de trabajo con el Consejo Nacional de Seguridad en la Casa Blanca; además de un encuentro con el Asesor Adjunto de Seguridad Nacional, Daniel Erikson, y con la Asesora Adjunta de Seguridad Nacional para Tecnología Cibernética y Emergente, Anne Neuberger.

En la antesala de su tradicional encuentro entre ministros de finanzas y banqueros centrales, llevado a cabo entre el 17 y el 19 de abril este año, el FMI dio a conocer las nuevas perspectivas globales y las proyecciones actualizadas para la Argentina, en un informe en el que estimó que la actividad económica caerá un 2,8% en 2024; a la vez que precisó que la inflación anual se ubicará en torno al 150%.