Si bien todas las miradas económicas apuntan al viaje de Guzmán por EE.UU., en el Frente de Todos miran de reojo los números de la economía interna. En ese sentido, el Presidente dio una advertencia a los empresarios alimentarios acerca de la suba de precios.

"Algunos siguen aumentando en marcas alternativas y no están ayudando al proceso de desindexación de la economía y de resolver el problema inflacionario", apuntó Alberto Fernández, en una entrevista -el domingo por la noche- con C5N.

"Tenemos que prestarle atención a los que peor están, a los más débiles. No nos van a doblegar en esa política. Por eso, estoy preocupado por el cuidado de los precios; por eso, le pido responsabilidad a los empresarios", completó.

En el Ejecutivo saben que la inflación es un tema sensible para los argentinos. Y que en enero, el índice de precios no fue el mejor: según un informe de la consultora EcoLatina, en el primer mes del año la suba será del 3,4%. "Se acumulará 6,5% en el primer bimestre de gestión de Alberto Fernández. En resumen, al menos durante los primeros meses del nuevo gobierno la inflación seguirá elevada", indicó la consultora en el informe.

El gobierno, por su parte, decidió tomar algunas medidas para reducir el costo de vida de los argentinos. La primer apuesta fue el relanzamiento de Precios Cuidados: el énfasis, en esta edición del programa, no estuvo sólo en el 300 productos del listado sino en el "control" de precios por medio de la nueva App.  En su primera semana, el jefe de Gabinete Santiago Cafiero había enviado a los ministros a chequear los números en las góndolas.

Días después, se sumaron los intendentes bonaerenses.

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Suspensión de tarifas y Ley de Góndolas

Otras medidas para combatir la inflación fueron las suspensiones, por seis meses, de las tarifas de servicios y del valor del combustible. Fernández, a su vez, anticipó otro paso para reducir el índice de precios.

Se trata de la Ley de Góndolas, que el propio Presidente aseguró que se tratará en el Senado durante el mes de febrero.

La Ley de Góndolas propone, entre otros puntos, que una empresa no pueda tener más del 30% del espacio disponible en la góndola por cada categoría de producto y establece un mínimo de cinco proveedores por cada uno. El objetivo, según el texto, es que haya igualdad de oportunidades para las pequeñas y medianas empresas en las estanterías de los supermercados y que la mayor competencia ayude a bajar los precios.

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Uno de los dirigentes que más insistió con la sanción fue el próximo presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.“A veces la gente llega a la góndola y cree que compra un producto de distintas marcas, pero resulta que son del mismo fabricante”, había indicado, días atrás.

En el sector supermercadista luchan para que se trabe el tratamiento. Héctor del Campillo, de la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Córdoba, aseguró que el proyecto próximo a debatirse “es inconstitucional y ataca la libertad de comercio”, dijo el ex diputado en declaraciones a la prensa.