En momentos donde la brecha cambiaria crece en Argentina, suelen aumentar las operaciones de sobre y subfacturación en el comercio exterior. Distintas empresas accionan en ese sentido para hacerse de más dólares que los que les hubiera correspondido para realizar sus compras y ventas. Por ello, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) continuó con la fiscalización a empresas que recurrieron a medidas cautelares para importar mercaderías y que presentan diversos tipos de irregularidades. ¿Cuáles son los puntos principales del relevamiento?

El aviso de Massa. A horas de asumir como ministro, el líder del Frente Renovador mencionó que pondrían el ojo en este tipo de operaciones y advirtió que realizarían presentaciones en la justicia argentina frente a “aquellos que no se presenten a aclarar o rectificar, pero también se hará la denuncia ante la unidad de lavado de dinero de los Estados Unidos, ya que se usaron bancos de ese país y por lo tanto la sede del domicilio financiero determina jurisdicción".

Avance. Se trata de 124 empresas –de las cuales 70 fueron relevadas por la DGI; otras 30, pertenecientes a los rubros textil, neumático, juguetería y valija, fueron inspeccionadas por Aduana; y las 24 restantes, por Recursos de la Seguridad Social, que encontró que el 38% de sus trabajadores presentaban algún tipo de incumplimiento–. A su vez, son 722 las firmas que se encuentran “en observación” por haber realizado “más de 13.000 operaciones” de subfacturación de exportaciones y sobrefacturación de importaciones, que implicaron una pérdida de “casi US$ 100.000 millones” para las arcas del Estado, según informó AFIP.

Inconsistencias. Según el documento oficial de la entidad, se puso el foco en aquellas firmas que poseen una “insuficiente capacidad económica-financiera, inconsistencias en sus presentaciones de IVA y Ganancias, diferencias entre los montos de divisas girados al exterior y las importaciones realizadas” así como también “desvíos en la debida registración de los trabajadores”.

Operativos. Entre las acciones que llevaron a cabo los distintos organismos públicos está el relevamiento presencial de la mercadería, la documentación y el personal. Además, se realizaron requerimientos de información y documentación relativa a la operación comercial, las transferencias de titularidad realizadas, el detalle de giros de divisas y el destino de la mercadería, así como también la demostración de la capacidad económica y la trazabilidad de su facturación en el mercado interno.

Sanciones. Entre las compañías relevadas, aquellas que mostraron alguna irregularidad recibieron distintos tipos de sanciones: desde apercibimientos, suspensiones o la eliminación por completo del registro de importadores y exportadores hasta denuncias penales por evasión, lavado de activos e infracciones al régimen penal cambiario.