El Gobierno recibió este miércoles el desembolso de USD 4.700 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI) tras la aprobación de la séptima revisión del acuerdo de facilidades extendidas, pagó vencimientos que tenía con el organismo multilateral por USD 1.954 y el jueves deberá cancelar obligaciones por otros USD 800 millones.

En tanto, otros USD 960 millones irán a la CAF, que había habilitado ese monto para el pago de diciembre de 2023. El resto se utilizará para hacer frente a los compromisos de abril. De esta manera, el Banco Central informó que sus reservas alcanzaron los USD 27.635 millones. 

La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, reconoció en Washington que en Argentina "se están realizando esfuerzos para corregir grandes y extensos desajustes de precios relativos, para reformar el sector energético y para crear una economía más simple, basada en reglas y orientada al mercado", en referencia a las medidas adoptadas por el Gobierno de Javier Milei.

En un comunicado, admitió que "se están abordando las barreras al crecimiento, el empleo formal y el comercio, mientras se prevé un marco regulatorio más predecible para impulsar la inversión y liberar el potencial energético y minero de Argentina".

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La economista búlgara sostuvo, asimismo, que "será esencial una formulación de políticas ágil y una planificación de contingencias, y es posible que se necesiten medidas adicionales para asegurar los objetivos del programa y restaurar la estabilidad de manera duradera".

El martes pasado, el FMI dio a conocer un informe en el que pronosticó para Argentina una caída del PBI en 2024 del 2,8%.

En el anterior documento, difundido en octubre de 2023, antes de las elecciones generales, el organismo multilateral de crédito había proyectado para este año un crecimiento de la actividad económica del 2,8%.

En este sentido, la entidad dirigida por Georgieva especificó que la revisión a la baja "se debe al crecimiento negativo de Argentina en el contexto de un ajuste significativo de la política económica para restablecer la estabilidad macroeconómica", que lleva adelante la administración de La Libertad Avanza.

En cuanto a 2023, el organismo estima que la economía argentina cayó un 1,1%, lo que implica una mejora en relación al descenso de 2,5% que preveía en su informe anterior.

Con respecto a la inflación, el FMI no brindó números específicos, pero vaticinó una revisión al alza en el corto plazo, debido a "la realineación de los precios relativos y la eliminación de los antiguos controles de precios, la última depreciación de la moneda y su traspaso a los precios".

Asimismo, el organismo señaló que la situación argentina empujó a la baja a todo América Latina y el Caribe, en donde se proyecta un crecimiento promedio del 1,9% (en 2023 se estimaba que sería del 2,3%). A nivel mundial, se prevé que el desarrollo económico permanezca en 3,1% en 2024 y aumente hasta 3,2% en 2025.