El Banco Central tomó la determinación unilateralmente de rescindir los contratos que estaban vigentes y detener la impresión de billetes en la Casa de Moneda. Asimismo, se forzará a sus trabajadores a tomarse las vacaciones pendientes, y la posibilidad de que la imprenta estatal cierre parece estar más cerca. 

"Se informa que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) nos ha comunicado la decisión de rescindir los contratos de denominación de $1.000 y $2.000 que se encuentran vigentes al día de la fecha con Casa de Moneda", se informó a través de una comunicado interno dirigido al personal.

"A raíz de esa decisión se procederá a detener a partir de las 22 hs todos los procesos productivos referentes a la fabricación de billetes", agregaron en el escrito, en referencia a este jueves por la noche.

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"Por tal motivo, a todo el personal afectado directamente a dicha actividad productiva, se le dará curso a la utilización de los períodos vacacionales que tengan disponibles", concluyeron.

De esta forma, desde el Gobierno apuestan a la impresión en el exterior, especialmente de los billetes de $10.000 y $20.000, ya que consideran que los de $1.000 y $2.000 no son más necesarios, producto de la desvalorización que sufrieron ante la inflación.

Asimismo, desde el Poder Ejecutivo remarcan dos grandes razones que fundamentan la decisión: el incumplimiento en los tiempos de entrega y el precio que la Casa de Moneda le cobró al Banco Central por la impresión del dinero, suma que duplicaría el valor de lo implica traer los desde el extranjero.