A los 38 años, y después de una excepcional carrera que lo ubica entre los cinco más grandes de la historia, el español Rafael Nadal le dijo adiós al tenis. Fue en Málaga, donde el equipo de su país cayó ante el de Países Bajos en los cuartos de final de la Copa Davis.

"Rafa" había anunciado que este torneo, emblemático para él y que ganó en cinco ocasiones (2004, 2008, 2009, 2011 y 2019), sería su "último baile".

Y así fue. Tras caer ante el neerlandés Botic Van de Zandschulp por 6-4 y 6-4, todo el mundo intuyó que nunca más vería al mallorquín como tenista profesional.

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En la previa del duelo, y mientras se entonaban los himnos, la figura de Nadal se llevó el foco de las cámaras, que captaron sus lágrimas ante la inminente despedida.

Tras su derrota, su compatriota Carlos Alcaraz se impuso ante Tallon Griekspoor, lo cual forzó el duelo de dobles para dirimir al semifinalista. En esa contienda, el alicantino y Marcel Granollers perdieron 7-6 (4) y 7-6 (3) ante Van de Zandschulp y Wesley Koolhof para terminar el día. Así quedó sellado su retiro.

"No estoy cansado de jugar al tenis, simplemente el cuerpo no quiere jugar más": el emotivo discurso de "Rafa" Nadal en su despedida (Video: DSports).

Pasaron más de 23 años desde aquel 29 de abril de 2002, cuando Nadal logró su primera victoria en el circuito profesional. Fue en el ATP 250 de Mallorca, con 15 años y 330 días. En ese entonces, se convirtió en el tenista más joven en ganar un partido de un torneo oficial del circuito internacional al imponerse al paraguayo Ramón Delgado, 81 del mundo.

Lo que siguió fue una carrera plagada de éxitos: dos oros olímpicos y 92 títulos en su palmarés, 22 de ellos de Grand Slam. En este apartado, ganó 14 Roland Garros, dos Abiertos de Australia, cuatro US Open y dos Wimbledon.

Además, obtuvo cinco Copas Davis, en la que debutó en 2004. "Las gracias las tengo que dar a tanta gente, que es difícil empezar. Gracias al público. Sinceramente han sido 20 de carrera profesional en los que me llevaron en volandas. En los momentos buenos me ayudaban a ganar el siguiente punto y en los malos a seguir peleando", destacó.

"Me he sentido muy afortunado por sentir tanto cariño alrededor de todo el mundo, especialmente aquí en España", añadió, con toda su emoción a cuestas.