La Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) recibió una amenaza de bomba, apenas un día después de que las embajadas de Israel y Estados Unidos en Buenos Aires fueran desalojadas por la misma razón, aunque en este caso ya se detuvo al responsable del hecho.

La Policía Federal Argentina y el Escuadrón Antibombas inspeccionaron las instalaciones de la sede judía y comunicaron que el resultado fue negativo y no se encontró ningún elemento explosivo.

“Ante una advertencia recibida por mail, la Policía Federal Argentina dispuso este mediodía la realización de una revisión preventiva dentro de la sede de Pasteur 633, que no incluyó la evacuación de las personas que estaban en ese momento en el edificio”, señalaron desde las redes sociales de la AMIA.

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“Todas las tareas programadas continuaron realizándose en forma habitual durante la revisión”, aclararon desde la cuenta @infoAMIA, en X.

Las amenazas se produjeron en un contexto de amenazas por explosivos a lo largo y ancho del mundo a raíz de la guerra que estalló entre Israel y Hamas, el grupo terrorista arraigado en la Franja de Gaza.

El miércoles, las embajadas de Israel y Estados Unidos en la Argentina recibieron amenazas de bomba por correo electrónico. Poco después de las 10 de la mañana de ese día, trascendió la intimidación a la sede diplomática israelí, que llegó a través de un mail con el siguiente mensaje: “Amenaza de bomba en la Embajada: judíos los vamos a matar a todos”.

Este jueves, tras un allanamiento ordenado por la Justicia Federal, la división antiterrorismo de la Policía Federal confirmó que arrestó a un sospechoso, acusado de ser el autor de esas intimidaciones.

Según trascendió, el hombre fue identificado a partir del análisis de dispositivos y de la ubicación IP desde donde partieron los mails, por lo que allanaron su domicilio en la localidad de Don Torcuato, en el partido de Tigre.

De acuerdo con los investigadores, desde la dirección IP por la que fue identificado también partieron amenazas durante las últimas semanas a las sedes diplomáticas de Canadá, Emiratos Árabes Unidos, Irán y la Delegación de la Unión Europea. Todos los mensajes tenían un contenido similar: se enviaban por correo electrónico y se amenazaba a las embajadas y a sus respectivos funcionarios.

Esta nueva ola de amenazas no está ocurriendo únicamente en la Argentina. En la última semana, ocurrieron múltiples actos de esta naturaleza en todo el mundo. Tal es el caso de Francia, que debió desalojar el Palacio de Versalles tres veces desde que estalló el conflicto en Medio Oriente.