A pocos días de que se cumplan 24 años del atentando a la AMIA, el juez federal Rodolfo Canicoba Corral le pidió a Rusia que detenga a uno de los acusados por el hecho, un diplomático iraní que está en la mira judicial desde noviembre de 2006.

La agencia internacional Reuters informó hace algunos días que Ali Akbar Velayati se reuniría hoy con el presidente ruso Vladimir Putin. Luego de las averiguaciones correspondientes, el juez redactó la resolución donde recuerda que desde el 9 de noviembre de 2006 el diplomático tiene captura nacional e internacional.

Ali Akbar Velayati fue ministro de Relaciones Exteriores de la República Islámica de Irán entre 1981 y 1997. Canicoba Corral le imputa haber estado en la reunión que se llevó a cabo en el Consejo Supremo de Seguridad el 14 de agosto de 1993 y donde se tomó la decisión de atentar contra Argentina.

"La importancia medular que tiene el ministerio a su cargo dentro de la matriz terrorista radicó en su grado de colaboración y puesta a disposición de todos los recursos con los que contaba a los fines del éxito de la operación a través de la instrumentación del atentado otorgando pasaportes, pasajes y cobertura diplomática", resaltó Canicoba en el fallo donde le pide al Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto que le solicite a Rusia la detención preventiva con fines de extradición.

Argentina y Rusia tienen vigente un tratado de extradición. De todas formas, no es la primera vez que Akbar Velayati es requerido por la Justicia argentina. En octubre de 2016, el juez y la Unidad Fiscal AMIA detectaron que estaba en Bagdad, capital de Irak, y pidieron su detención, pero no se concretó.