La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), a cargo de Mercedes Marcó del Pont, explicó que se recaudaron $223.000 millones por el impuesto a las grandes fortunas. “Los recursos generados serán fundamentales para hacer frente a las urgencias sanitarias y económicas que nos impone la pandemia", agregó la titular del organismo. 

De acuerdo a los registros, aproximadamente 10.000 contribuyentes efectivizaron el pago del gravamen, que corresponde para aquellos patrimonios superiores a $200 millones. En contrapartida, 200 personas realizaron reclamos judiciales y no abonaron. 

Los $223.000 millones se dividirán en distintos rubros:

  • El 20% de lo recaudado, aproximadamente $45.000 millones, será destinado a la compra y elaboración de equipos médicos, elementos de protección, medicamentos, vacunas y todo insumo crítico utilizado para prevención y asistencia sanitaria. 
  • Otro 20% se aplicará a subsidios para micro, pequeñas y medianas empresas, en pos de que se sostenga el empleo y el salario de los trabajadores. 
  • El mismo porcentaje que los puntos anteriores se utilizará para financiar las becas Progresar, que acompañan a estudiantes de todos los niveles de formación. 
  • Un 25% del impuesto -casi $55.000 millones- se dedicará al financiamiento de diversos programas de exploración, desarrollo y producción de gas natural, ya que estas actividades son de interés público nacional. 
  • Finalmente, un 15% -más de $33.000 millones- irá para mejorar las condiciones de salud y habitacionales en barrios populares, por medio del Fondo de Integración Socio Urbana. 

En cuanto a los incumplidores, según precisó Marcó del Pont, "los procedimientos abiertos a través de la Dirección General Impositiva (DGI) permiten analizar” su patrimonio “durante un plazo aproximado de 150 días, donde el organismo está habilitado a solicitar información detallada".