El Gobierno nacional buscará cerrar el año este martes con un auspicioso comienzo de la campaña de vacunación contra el Covid-19 y la sanción de dos proyectos de ley sustanciales para la gestión de Alberto Fernández. Mientras las provincias del país inicien el proceso de inmunización con el personal de la salud, las inmediaciones del Congreso de la Nación serán una olla a presión a la espera de la votación por la legalización del aborto. En una jornada que se prevé histórica, el oficialismo también se apresta a convalidar la nueva fórmula de movilidad jubilatoria.

Luego de que todos los distritos hayan recibido las primeras dosis de la Sputnik V, y en medio de un rebrote de casos del SARS-CoV-2 por la relajación en las medidas de distanciamiento social, la Casa Rosada espera terminar el 2020 con los primeros inyectados de la vacuna rusa, en un operativo a largo plazo que proyecta tener a 14 millones de argentinos inoculados para la llegada del otoño.

De las 300.000 dosis del suero ruso, la provincia de Buenos Aires recibió 123.000 vacunas; la Ciudad de Buenos Aires 23.100; Santa Fe 24.100; Córdoba 21.900; Tucumán 11.500; Mendoza 11.000; Entre Ríos 10.100; Salta 8.300; Chaco 7.700; Corrientes 6.700; Santiago del Estero 5.900; Misiones 5.200; San Juan 4.700; Jujuy 4.600; Río Negro 4.400; Neuquén 3.600; Formosa 3.400; San Luis 3.300; Chubut 3.000; Catamarca 2.800; La Rioja 2.600; Santa Cruz 2.400; La Pampa 2.300 y Tierra del Fuego 1.300.

En la primera etapa del plan, la administración nacional prevé la vacunación de hombres y mujeres del sistema sanitario, en tanto la siguiente fase incluirá a trabajadores y trabajadoras de la seguridad y la educación; personas mayores de 60 años y aquellas de entre 18 y 59 años que integren grupos de riesgo por presentar enfermedades preexistentes.

Pese a que hasta el momento los resultados de la fase 3 de la Sputnik V no han sido publicados en ninguna revista científica, el Ministerio de Salud autorizó su aplicación de emergencia con el visto bueno de la ANMAT, luego de que la viceministra Carla Vizzotti viajara hacia el Kremlin con una comitiva para observar el desarrollo del producto.

La Interrupción Voluntaria del Embarazo, con final incierto

Si bien el Gobierno confía en contar con los votos necesarios para la aprobación de la iniciativa, el poroteo previo a la sesión contabiliza 32 voluntades para ambos bandos, con seis senadores indecisos. El inicio del debate está previsto para las 16:00. En las inmediaciones del Parlamento, verdes y celestes realizan una vigilia en medio de un fuerte operativo de seguridad.

Tras la convalidación del proyecto en la Cámara de Diputados con amplio margen, el escenario en la Cámara alta se advierte reñido e incluso no se descarta que la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner, deba desempatar el resultado, pese a que desde su entorno remarcaron la renuencia que le genera ocupar esa posición. En caso de que la contienda finalice igualada, la expresidenta votará a favor de la legalización.

En las horas previas, legisladores como el exgobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, solicitaron cambios en la iniciativa para dar el apoyo. El Gobierno negó esa posibilidad dado que las modificaciones devolverían el proyecto a Diputados y eso frustraría la intención de que el texto sea ley antes de fin de año. Frente a esa situación, el Poder Ejecutivo avisó que solamente está abierto a negociar retoques en la reglamentación de la ley.

Nuevo cálculo en las jubilaciones

Desde las 11:00, el oficialismo buscará convertir en ley la nueva fórmula de movilidad para el cálculo de los haberes de los adultos mayores, pensiones y asignaciones. El proyecto, con media sanción del Senado, combina en un 50% la recaudación impositiva de la ANSES y en otro 50% la variación salarial, surgida del porcentaje más alto entre el medido por el INDEC y el índice RIPTE que confecciona el Ministerio de Trabajo.

La fórmula es similar a la que estableció en 2008 el primer gobierno de Cristina Kirchner y que estuvo vigente hasta fines de 2017, cuando la administración de Cambiemos logró convalidar una receta diferente para el cálculo de los haberes, la que tenía en cuenta la variación de la inflación como uno de sus componentes.

La bancada del Frente de Todos logró sumar el apoyo de los diputados opositores Paulo Cassinerio (Córdoba Federal), Diego Sartori (Frente de la Concordia Misionero) y José Luis Ramón (Unidad Federal para el Desarrollo. De ratificarse su acompañamiento, el oficialismo contará con los sufragios suficientes.

Además, espera lograr la adhesión de dos integrantes del bloque Justicialista, de la neuquina Alma Sapag y al menos otros dos de Acción Federal. En contra de la iniciativa ya se sabe que votarán Juntos por el Cambio, el bloque que responde a Roberto Lavagna, Consenso Federal, y los dos diputados del Frente de Izquierda.