Para el reconocido académico norteamericano Steven Levitsky, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Harvard y especialista en América Latina, la polarización en la Argentina es inferior a la de otros países como Estados Unidos, Brasil, Venezuela o Bolivia. En tanto, consideró que la Argentina muestra un régimen democrático fuerte pero con instituciones débiles que se agravan por la situación económica.

En contacto con ElCanciller.com, el coautor del reciente libro Cómo mueren las democracias, junto a su colega Daniel Ziblatt, sostuvo que Donald Trump tiene un 50% de posibilidades de ser reelecto que se justifica por el crecimiento económico de Estados Unidos, pero su rendimiento se reduce "debido a su ineptitud, su racismo y su autoritarismo".

Steven Levitsky: "La sociedad argentina no parece terriblemente polarizada"

Steven Levitsky y Daniel Ziblatt


¿Cuál es su perspectiva sobre la política argentina en comparación con otros países?

—La política argentina tiene algunas fortalezas reales, incluida una sociedad civil fuerte y una ciudadanía que es consciente de sus derechos y está dispuesta a defenderlos. Pero tiene un desempeño inferior al de sus vecinos en términos de la fortaleza de sus instituciones. Las instituciones políticas y económicas argentinas siguen siendo débiles e inestables, como lo han sido desde la década de 1930, mientras que los vecinos Chile, Brasil y Uruguay han fortalecido gradualmente sus instituciones en las últimas tres décadas.

¿Esa debilidad se observa también en el funcionamiento de la democracia?

Yo la llamaría una democracia relativamente fuerte con instituciones débiles. Las características centrales de la democracia (elecciones libres, libertades civiles y control civil sobre los militares) son bastante fuertes en la Argentina. Pero las instituciones secundarias siguen siendo notablemente débiles.

¿La estabilidad democrática corre riesgos frente a la incesante inflación y los largos períodos recesivos?

—La Argentina ha sufrido dos colapsos económicos masivos (1989 y 2001-2002) sin perder su democracia. Es un logro extraordinario que muestra la solidez de las instituciones democráticas. Pero el pobre desempeño económico nunca es bueno para la democracia. La gente eventualmente pierde la fe en el proceso democrático.

Has señalado que en los Estados Unidos hay una fuerte polarización social que puede conducir a un gran conflicto. ¿Es este fenómeno universal de sociedades dividido en dos? Porque en la Argentina algunos analistas ven un fenómeno similar.

—La democracia argentina está algo polarizada hoy entre el kirchnreismo y el macrismo, pero para mí el nivel de polarización es más bajo que el de Brasil, Estados Unidos, Venezuela o Bolivia. El macrismo es una derecha mucho más moderada y conciliadora que, por ejemplo, Jair Bolsonaro o Trump, y aunque Cristina puede ser algo polarizadora, no es Hugo Chávez, y sabe muy bien que necesita moverse hacia el centro (por ejemplo, Alberto F.). Además, la sociedad argentina no parece terriblemente polarizada, ciertamente menos que Estados Unidos.

Los índices económicos mejoraron con Trump. ¿Tiene una alta probabilidad de ser reelegido?

—Tiene una probabilidad de 50-50 de ser reelegido. Normalmente, un titular con esta economía fuerte sería reelegido fácilmente. Pero Trump tiene un rendimiento inferior debido a su ineptitud, su racismo y su autoritarismo. La economía aún puede llevarlo a la victoria, pero será una elección muy cerrada y podría perder.