Las elecciones en Neuquén no solo serán las primeras del año, también marcarán el pulso de la campaña. Allí hay tres candidatos con chances: el actual gobernador Omar Gutiérrez del oficialista Movimiento Popular Neuquino, el radical Horacio "Pechi" Quiroga, intendente de la capital y candidato de Cambiemos, y Ramón Rioseco de Unidad Ciudadana. 

Hace poco desde la Rosada optaron por el voto útil para impedir que gane Unidad Ciudadana. Frente a los resultados de las encuestas que ubican a Rioseco y a Gutiérrez en un empate técnico, en el Gabinete se empezó a delinear el plan B: si Quiroga no perfila bien, la apuesta estará sobre Gutiérrez, que además, tiene una muy buena relación con Mauricio Macri

Pero esta lectura de nacionalización de las elecciones, que apunta nuevamente a la dicotomía entre macristas y kirchneristas, le es ajena a los dirigentes neuquinos. Pese a que hubo cierto impacto en Quiroga, que en apariencia había quedado apartado de la alianza y en Rioseco, que parecería obtener una ventaja, desde la provincialización las interpretaciones son distintas.

Por un lado, el enfoque local representa ciertas ventajas para el MPN. En primer lugar, le es útil para dejar de lado los roces con el Gobierno por algunas medidas tomadas en la provincia, como el recorte de subsidios en Vaca Muerta y el congelamiento de obras en Chihuidos, y por otro, para alejarse de lo que pasa en el escenario nacional y actuar con mayor independencia, más allá del impacto que tenga para el partido en el plano legislativo en el Congreso.

Para Quiroga en cambio, que ya fracasó por nacionalizar en 2007 y 2015, significa un nuevo escenario de competencia. Además, su distanciamiento de la figura de Macri podría darle un poco más de vuelo dada la creciente mala imagen del primer mandatario en los sondeos.

La búsqueda por el desdoblamiento fomentada desde la gobernación para fortalecer las localías, marca el enfoque provincial. La visión del oficialismo nacional, alejada del análisis interno para posicionar a sus candidatos, podría afectar a doblemente Cambiemos en las urnas.

No sólo porque Neuquén es una provincia clave en términos electorales sino también para la gestión, por ser el lugar donde se encuentra el yacimiento de Vaca Muerta, uno de los más grandes del mundo y principal foco de atención de los inversores extranjeros.