La revancha de Jujuy: tecnología, energía limpia y litio, claves de una provincia que busca cambiar su historia
El radical Morales busca convertir a la provincia norteña en un polo innovador donde el Estado es el principal inversor.
De alguna manera, es el sueño de cualquier militante de la UCR: el oficialismo jujeño, a cargo del radical Gerardo Morales, acaba de vencer por treinta puntos al peronismo en su provincia. El mismo peronismo que tiene entre sus referentes a Milagro Sala, de quien el kirchnerismo ha hecho un mártir de la revolución.
Morales es uno de los radicales que lograron sacarle partido a la desbalanceada alianza que supo ser Juntos por el Cambio. Quizás el que más. Aun con ese antecedente, que parece ser un lastre electoral, renovó en 2019 su mandato y lo acaba de ratificar en las legislativas anticipadas. Hoy, que la UCR discute tanto su posición dentro de la principal fuerza opositora como su liderazgo interno, el gobernador infla el pecho.
El macrismo repite como mantra, desde hace varios años, que una buena gestión es la mejor estrategia de campaña. Morales parece haber aprendido la lección y hoy celebra que eso se haya traducido en las urnas.
El Estado como inversor de una economía capitalista es un experimento que se ha realizado muchas veces, en todo el mundo. Es cierto que en Argentina no tiene los mejores pergaminos, salvo las dos presidencias de Perón. Pero el gobierno jujeño apuesta fuerte a este modelo de desarrollo con tres puntos clave.
En primer lugar, la energía solar. La provincia tiene el parque solar más grande del continente que, se calcula, abastece a 280.000 familias argentinas. Como contrapartida, el gobierno afirma que las ganancias que genera este negocio permiten la construcción de 250 escuelas a lo largo y ancho de la bota.
De la mano de la cuestión energética está una explotación natural que obsesiona a líderes mundiales de todos los ámbitos, incluso al propio Elon Musk: el litio. Este mineral es fundamental en el proceso de confección de baterías para celulares. Dentro de Jujuy se encuentra una de las reservas más abundantes del planeta.
Otra de las innovaciones que son un éxito a nivel global tiene que ver con el desarrollo del cannabis. Aunque en el país todavía se debate el uso recreativo de la planta, la producción de medicamentos y fármacos que surgen de ella, es un tema bastante más instalado. Jujuy creó una empresa estatal, Cannava, que cultiva y produce estos insumos para el ámbito sanitario.
Los resultados, de acuerdo con el oficialismo, son idílicos. Es cierto que en la teoría deberían serlo: al fin y al cabo, los recursos naturales abundan. Por ahora, el experimento parece funcionar. Aunque falte para poder ver los resultados a largo plazo, Morales ya ha vuelto a poner a Jujuy en el mapa de la discusión política argentina. Hace poco afirmó que quiere ser candidato a presidente. La interna opositora está al rojo vivo y es cierto que avanza de un lugar alejado, para la comprensión centralista que reina en la política actual.
Sin embargo, hasta ahora es el único que puede sentarse a la mesa y discutir con el antecedente de haber derrotado cómodo al peronismo en su distrito. Se verá al cierre de listas.