En medio de un año electoral que encuentra al Partido Justicialista resquebrajado por las internas y con dificultades para mostrarse unido, un grupo de representantes peronistas de la provincia de Buenos Aires -entre ellos intendentes, legisladores acompañados por organizaciones sindicales y sociales- lanzó el movimiento "Derecho al Futuro" para enfrentar a Javier Milei. "El pueblo necesita de un peronismo que abrace al pueblo y enfoque sus energías en reconstruir el sueño colectivo de una patria justa, libre y soberana", señalaron en apoyo al gobernador Axel Kicillof, a quien consideraron "el escudo y la red que luchan por proteger los derechos de los bonaerenses ante un Estado desertor".

De esta forma, aquellos que responden al mandatario de la provincia que es el principal distrito electoral de la Argentina, instaron a la reconstrucción de una fuerza política que enfrente en las elecciones legislativas de este 2025 el modelo de La Libertad Avanza.

Mediante un comunicado titulado "Abrazar al pueblo y encender la esperanza", los dirigentes señalaron que el peronismo "enfrenta un desafío histórico" y debe liderar una alternativa al "experimento de ajuste y crueldad" que, según afirmaron, lleva adelante el Ejecutivo nacional.

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"Ante este modelo de especulación financiera, concentración de la riqueza y entrega a intereses extranjeros, la Argentina necesita volver a edificar una fuerza social y política que represente al trabajo, la producción agropecuaria e industrial, a comerciantes, profesionales, estudiantes, artistas, científicos y jubilados", expresaron.

En esta línea, destacaron la gestión de Kicillof: "Mientras el gobierno nacional abandona sus responsabilidades, la Provincia busca aliviar el daño social que provoca la apuesta por el mercado desregulado".

El documento lleva la firma de intendentes del Conurbano y el interior de la provincia, así como de legisladores nacionales y provinciales - entre los cuales se encuentran Julio Alak, Fernando Espinoza, Jorge Ferraresi, Santiago Cafiero y Victoria Tolosa Paz- y referentes de diversas organizaciones políticas, sindicales y sociales, entre ellas la Confederación General del Trabajo (CGT) y las dos líneas de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA).

Es que el peronismo -sumido en una fuerte disputa en su interior entre Cristina Kirchner y el Gobernador bonaerense, aunque ambos aseguran que no hay tal enfrentamiento- tiene por delante un desafío histórico: reconstruirse para liderar una alternativa a Milei. En este contexto, el peronismo tiene la obligación y el desafío de ser el motor de esa construcción opositora, volviendo a su esencia de movimiento popular, amplio, nacional y federal.

"Es momento de escuchar, de comprender las razones de nuestra derrota a nivel nacional, de recuperar la agenda de las mayorías, defendiendo los derechos de todos", indicaron desde el nuevo movimiento, y añadieron: "Es hora de empezar a reinventar nuestro proyecto histórico, de un pueblo con igualdad, de un pueblo que pueda aspirar a ser feliz. Es momento de actualizar nuestras ideas con una perspectiva de futuro, b".

En el mismo sentido, puntualizaron: "Es en el gobierno de la Provincia donde se visualiza una alternativa y donde se enciende una esperanza concreta, real, que demuestra con hechos que hay otra forma de gobernar: con compromiso, con transparencia y con políticas públicas en favor del pueblo".

"Convocamos a la construcción de una gran fuerza social y política para el desarrollo y la justicia social, que represente a trabajadores, sectores productivos, la ciencia, la educación y la cultura", propusieron, con el foco en la defensa de "los intereses nacionales" y la promoción "del desarrollo" y la "participación de todos".

"Solo con un peronismo fuerte, amplio, unido y con sus raíces en el pueblo podremos forjar un país más justo, solidario y con oportunidades para todos", concluyeron.