El Gobierno evalúa avanzar por decreto con algunos puntos del proyecto de la Ley Ómnibus, luego de que la iniciativa de más de 600 artículos fracasara en la discusión en particular en la Cámara de Diputados debido a la falta de acuerdo con los legisladores dialoguistas, lo que derivó en que el presidente Javier Milei diera la orden de abortar su tratamiento en el Congreso.

Con la denominada "Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" frustrada y el capítulo labor del DNU desregulatorio de la economía frenado por la Justicia, La Libertad Avanza trabaja en impulsar reformas y desregulaciones previstas en esas normativas, pero explorando otras vías, como los decretos o incluso la reglamentación simple.

Quedarán afuera inevitablemente de este paquete cuestiones tributarias o penales, que solo el Gobierno puede impulsar impulsar por ley.    

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Pero los puntos que sí podrían tener cauce son los relacionados a los fondos fiduciarios, que el mandatario busca eliminar al considerarlos "una caja negra" de la política, tal como reafirmó este miércoles en una extensa entrevista televisiva. 

"No tengas dudas", respondió Milei al ser consultado sobre si insistirá con la iniciativa a través de un nuevo decreto. "Este tema pone nerviosos a muchos personajes de la política que viven de eso", remarcó sobre uno de los temas que trabaron el avance en la Cámara baja de la Ley Ómnibus.

La gestión libertaria también avanzaría con el capítulo para promover inversiones y otras desregulaciones en distintos sectores económicos. 

Otra temática que se busca impulsar de ley de Bases es la relacionada a la cultura, como por ejemplo el sistema de subsidios del INCAA, por vía de la reglamentación del propio instituto.    

Un tema que quedó en suspenso también por la caída de la normativa es el de las jubilaciones. La frustrada normativa proponía eliminar la fórmula de movilidad actual y darle al Poder Ejecutivo todas las prerrogativas para actualizar a discreción los haberes hasta que se acordara un nuevo cálculo.    

Habiendo naufragado el proyecto, sigue rigiendo la fórmula actual, que viene siendo muy criticada porque perjudica a los jubilados debido a la alta inflación, lo cual obliga al Gobierno a dar un bono para compensar una porción de las pérdidas.

Las iniciativas se impulsarán en el marco de una mesa de trabajo que integrarán el asesor presidencial y "padre" del mega DNU y la ley de Bases, Federico Sturzenegger, como también el vicejefe de Gabinete, José Rolandi; el secretario de Legal y Técnica, Javier Herrera Bravo, y el asesor Santiago Caputo.