La gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, convocó a los docentes para hoy a una nueva reunión para avanzar con la negociación, anclada en un 15 por ciento que ofrece la Provincia y el rechazo unánime de los sindicatos.

¿La buena? En los últimos días bajó la tensión entre las partes y los gremios confirmaron que continuarán las mesas de diálogo sin la necesidad de realizar paros. Es decir, los 4,5 millones de chicos que estudian en el conurbano podrán asistir a clases.

"Los chicos van a estar en las aulas porque no hay medidas de fuerza ni hay anunciado ningún otro paro. Veremos si se puede avanzar, vamos a discutir con vocación de negociación", aseguró al diario La Nación el secretario general del Suteba, Roberto Baradel.

La principal idea de Vidal, al igual que ocurrió en toda la negociación, es reducir el ausentismo de los maestros y elabora cifras cercanas al 17 por ciento, aunque los sindicatos lo desmienten. Traducido en dinero, el gobierno bonaerense gastaría cerca de $19 mil millones al año en suplencias.

¿Cuál es el objetivo? Intentar borrar esas licencias, eliminar ese gasto y subir dos o tres puntos la oferta inicial. "No queremos que se castigue al maestro que tomó licencia para cuidar a un hijo enfermo o una licencia para perfeccionarse", respondió Baradel.

Mientras los chicos están en las aulas, los gremios y la Provincia vuelven a reunirse, aunque los números por ahora no indicarían un rápido consenso.