Decepcionada con Rosatti, altera Carrió los planes de Macri: planea jubilarse y podría no ser candidata
En el día de su cumpleaños número 62, Elisa Carrió afirmó que se jubilará. A pesar de sentirse "una vieja espléndida", la líder de la Coalición Cívica dijo estar "decepcionada" con el juez de la Corte Suprema Horacio Rosatti, al que ella misma propuso para integrar el máximo tribunal, por haberse plegado a la estrategia de quien es hoy, su principal enemigo en el Poder Judicial: Ricardo Lorenzetti.
“Lo que está haciendo Rosatti es una de las tantas cosas que me decidieron a pedir mi jubilación. Estoy decepcionada”, confesó en una entrevista con el diario Clarín. Según la diputada, desde que llegó a la Corte cambió sus posiciones históricas y formó una alianza repentina con Lorenzetti para complotar contra el nuevo presidente del tribunal, Carlos Rosenkrantz, el preferido del presidente Mauricio Macri. Lilita le transmitió a Rosatti su decepción a través del diputado Juan Manuel López.
"No puedo creer que Rosatti sostenga a Lorenzetti y De Marchi (Héctor, administrador de las finanzas de la Corte) en materia delictual”, sentenció la líder de la CC-Ari, que también dio a entender que es muy posible que no sea candidata de Cambiemos en las próximas elecciones.
En una reciente acordada, Lorenzetti, Rosatti y Juan Carlos Maqueda votaron una modificación en el manejo de la burocracia del tribunal y acordaron dejar a Rosenkrantz sin las atribuciones especiales de las que gozó Lorenzetti, lo que se traduce en un recorte de poder muy fuerte. Hasta ahora, el presidente del cuerpo era quien disponía, junto al administrador general, sobre cómo y en qué gastaba su “caja” la Corte.
Lorenzetti, Maqueda y Rosatti resolvieron que el presidente del tribunal ya no podrá decidir contrataciones en el Poder Judicial por sí solo y que serán necesarias las firmas de al menos tres ministros. Además, se acordó que Rosenkrantz no sólo pierda la facultad de nombrar gente por sí mismo sino que además se pueda hacer designaciones sin su acuerdo.
Rosenkrantz -que, otra vez solo, votó en disidencia- pensaba remover de su cargo a Marchi, amigo personal de Lorenzetti. Pero no lo consiguió. Y por eso Carrió explotó.